El factor económico

Para el politólogo, otro factor que ha modificado el rol de la familia es el tema económico ya que, en los años cincuenta, el pasar por la universidad era sinónimo de percibir mayores ingresos. No obstante, hoy tener una licenciatura es, quizá, un requisito básico para conseguir un trabajo, mientras que tener un posgrado no garantiza una mejor posición económica.

“En los años cuarenta, las personas se casaban a los 17 años, salían de su hogar y a los 24 ya tenían un patrimonio. En los años setenta, se casaban a los 23 y antes de los 30 ya tenían una casa propia. En 2017, los jóvenes retardan la salida de casa de sus padres. La mayoría se independiza a los 35, tienen noviazgos más largos e incluso empiezan a vivir en unión libre.

“Hoy los salarios están muy castigados. Si piensas casarte, salir de casa, rentar o comprar un patrimonio, es difícil lograrlo con los salarios que tenemos. Muchos hijos prefieren prolongar su estancia en el hogar familiar, donde no tendrán que padecer altos gastos”, afirma Salgado.

Además, recuerda que, para tus abuelos o bisabuelos, era más accesible comprar una casa. La situación inmobiliaria era diferente, así como los ingresos. En cambio, en el presente se tiene menor facilidad para solicitar un crédito hipotecario.