Nueva vida para Paisaje de Azcapotzalco, de Juan O’Gorman
El que fue uno de los primeros murales de Juan O’Gorman, Paisaje de
Azcapotzalco, ayer volvió a lucir con todo el color y los detalles de sus primeros años tras haber sido restaurado. La obra se encuentra en la Biblioteca Fray Bartolomé de las Casas, en el centro de Azcapotzalco, donde fue creada por O’Gorman en 1926 a invitación de José Vasconcelos.
Paisaje de Azcapotzalco, mural al temple sobre yeso directo, fue hecho cuando el pintor apenas tenía 20 años. Es una pintura que se extiende en cuatro muros de la biblioteca, y que mide 50 metros de ancho por 1.50 de alto. Es espejo del paisaje de la posrevolución en Azcapotzalco, cuando comenzaba la industrialización al tiempo que sus ríos y montañas eran la imagen primera del lugar.
La restauración, que tuvo un costo de 260 mil pesos, fue promovida por la delegación Azcapotzalco y los trabajos fueron realizados por Jorge Herrera Zedillo, del Centro Nacional de Conservación y Registro del Patrimonio Artístico Mueble del INBA.
El delegado de Azcapotzalco, Pablo Moctezuma Barragán, acompañado por la cronista Ángeles González Gamio, presentó ayer la pintura que, destacó, había tenido varias restauraciones pero que en los últimos años no tuvo la atención necesaria, por lo que un área de la pieza estaba a punto de caerse, específicamente el muro oriente, donde ahora se hicieron los mayores trabajos de restauración.
“La carrera tan fructífera de Juan O’Gorman, como muralista y arquitecto, comenzó aquí en Azcapotzalco gracias al impulso de José Vasconcelos. Este mural, de 1926, tiene cerca de 92 años, y requiere de mucho cuidado. Durante mucho tiempo no se restauró”, comentó el delegado.
En la pintura se lee, junto a la firma, un texto del autor donde acotó que el mural tuvo como colaboradores a Julio Castellanos y a Hermilo Jiménez, y que se arregló en 1954. La primera restauración, en 1970, buscó recuperar la pigmentación, y en 2000, dijo Moctezuma Barragán (en su primera gestión en la delegación), se hizo una nueva restauración. Para entonces, un área de una esquina se había caído por completo, de ahí que ésta fue reconstruida con base en fotografías y pintada en grises para distinguir lo nuevo de lo que es obra original.
Ahora, detalló, la acciones correctivas fueron “la reparación del impermeabilizado del inmueble, y de instalaciones hidráulicas para erradicar la humedad; y se consolidaron las capas de soporte mediante inyección para reintegrar materiales”.