El consumo de las emociones
Presentación. BMW muestra la nueva generación de X3 con un enfoque más deportivo.
Pagar más de un millón de pesos por una camioneta de dimensiones medianas es algo que fácilmente se le puede adjudicar a la obstinada condición que los vehículos de lujo deben tener para cumplir su posición como tal, modelos alejados del alcance popular. Es más difícil (pero más justo) entender que también el elevado precio de un vehículo como la nueva BMW X3 se debe a un inconmensurable desarrollo de ingeniería para hacer de este un producto que se acomoda con suavidad en curvas a altas velocidades en carretera y por igual, resuelve las tareas de escalar una pendiente pronunciada en condiciones todoterreno.
Lecciones aprendidas. Luego de 14 años de comercialización en el mercado, la firma alemana ha entendido la relevancia de llenar todos los espacios dentro del auto con elementos de lujo y primera calidad. Así pues, encontramos elementos de aluminio, piel y telas de excelente manufactura en tablero, asientos y puertas. De igual modo, es agradable encontrar elementos distintivos de este modelo, como emblemas de la familia X escondidos a lo largo del auto, como en los postes y en las puertas.
Sin embargo, algo que siempre ha distinguido a los modelos de BMW y aún podrían considerarse como referentes, es la conectividad de infoentretenimiento. Esto permea tanto al software como al hardware, pues este crossover cuenta con la pantalla (10 pulgadas) de comandos más grande de su segmento. Más allá de la comodidad. Las programaciones que acompañan a la nueva BMW X3 no se limitan a las tareas de conectividad, pues este modelo es el tercer ejemplar de la marca alemana en contar con las más adelantadas tecnologías de conducción semiautónoma como los sistemas de control crucero adaptativo, asistente de dirección y también la ayuda a mantener el carril adecuado, la cual personalmente me asustó y generó una incomodidad en el manejo, pues es considerablemente intrusiva y poco interpretativa frente a lo que queremos detrás del volante a altas velocidades.
La nueva BMW X3 es una combinación entre el desempeño y las asistencias de conducción. La versión que pudimos manejar es la denominada X3 M40iA que cuenta con el vigoroso motor de seis cilindros en línea con un turbocargador que genera 360 caballos de fuerza, tan sólo 20 caballos menos que un deportivo de la categoría del BMW M2.
Su razón de ser. Por muy disparatado que pareciera justificar el por qué se comienza a estandarizar el millón de pesos como una unidad de referencia en el precio de un vehículo premium, los futuros dueños de una BMW X3 pueden estar tranquilos porque en este caso, el precio no ofende porque satisface, es decir, que su gasto (o inversión) no quitará el tiempo o perturbará el temperamento de quien haya desembolsado esta cantidad de dinero. Lo vale.b