México, EU y Canadá van por alianza energética
• Buscan alcanzar autosuficiencia con una mayor relación comercial • Hay capacidad para exportar 6 mdb de petróleo diarios, prevén
México, Estados Unidos y Canadá buscan conformar un mercado energético para alcanzar la autosuficiencia regional a través de mayores relaciones comerciales de hidrocarburos y electricidad, independientemente de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
Los secretarios de Energía de México y Estados Unidos, junto con el ministro de Recursos Naturales de Canadá, se reunieron el 14 de noviembre. Tras el encuentro se concluyó que conforme la infraestruc- tura física a través de América del Norte se amplíe los mercados energéticos de los tres países se volverán cada vez más interdependientes.
Se calcula que el bloque puede alcanzar una capacidad para exportar al mundo entre 4 millones y 6 millones de barriles de petróleo crudo diarios hacia 2018 y 2020.
En gasolinas y diesel prevén exportaciones de hasta 29 millones de barriles diarios entre 2018 y 2028, mientras que se estima que la región se convierta en un exportador neto de gas natural como resultado de un crecimiento de 43% en la producción total entre 2015 y 2029.
Independientemente de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), México, Estados Unidos y Canadá trabajan en formar un sólo mercado energético que permita alcanzar la autosuficiencia regional mediante el aumento de las relaciones comerciales de hidrocarburos y electricidad entre ellos.
Los secretarios de energía de México y Estados Unidos, junto con el ministro de Recursos Naturales de Canadá, lanzaron el sitio web Cooperación de América del Norte en Información Energética (NACEI, por sus siglas en inglés).
De acuerdo con el Departamento de Energía de Estados Unidos, tras la reunión de los funcionarios el pasado 14 de noviembre, se concluyó que “conforme la infraestructura física a través de América del Norte siga ampliándose, los mercados energéticos de los tres países se volverán cada vez más interdependientes”.
Tan es así que se prevé que el crecimiento de la producción tanto de crudo, como de gas natural supera la demanda del consumo, reduciendo las importaciones de los tres países.
“A pesar de un crecimiento de 7% en el consumo total de petróleo crudo como insumo para las refinerías en Canadá, México y Estados Unidos de 2013 a 2029, se proyecta que las importaciones netas en la región decaigan hasta 97% ya que la producción de petróleo crudo aumenta en 42% durante el mismo periodo”, explica.
Exportaciones en la región. Además, se estima que los tres países podrían alcanzar capacidad para exportar entre ellos y al resto del mundo entre 4 millones y 6 millones de barriles de petróleo crudo diarios hacia 2018 y 2020.
Lo mismo ocurre con los petrolíferos como gasolinas y diesel, los cuales mantendrán un alto nivel de exportaciones en el mercado de Norteamérica, de 27 a 29 millones de barriles diarios entre 2018 y 2028, mientras el consumo se nivela.
Además, se prevé que la región se convierta en un exportador neto de gas natural, como resultado de un crecimiento de 43% en la producción total de este combustible entre 2015 y 2029.
El reporte Cooperación de América del Norte en Información Energética, presentado el 1 de diciembre, agrega que “dado que muchos energéticos están incluidos en el libre comercio, los tres países se constituyen mutuamente como sus más grandes mercados para la importación y exportación de estos productos”.
Proximidad y barreras. El documento avalado por el secretario de Energía de Estados Unidos Rick Perry; el ministro de Recursos Naturales de Canadá, James Gordon Carr, y el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, sostiene que la proximidad geográfica de las tres economías ha dado pie a cierto grado de integración del mercado.
Por ejemplo, los mercados regionales de energía se extienden a través de la frontera de Canadá y Estados Unidos, ampliando el mercado entre ambos países.
Asimismo, el aislamiento geográfico de América del Norte crea barreras comerciales con el resto del mundo para productos energéticos, como el gas natural y la electricidad, mientras que otros energéticos tales como el petróleo crudo y los petrolíferos, se transportan de forma más fácil por el agua.
Como resultado, México, Canadá y Estados Unidos pueden comprenderse como un sólo mercado regional de energía (semiintegrado) con flujos internos de productos y vínculos externos hacia el resto del mundo.
El documento señala que la mayor parte del petróleo que exportan México y Canadá llega a las refinerías que se encuentran ubicadas dentro de la Unión Americana.
Por su parte, Estados Unidos también exporta volúmenes relativamente grandes de petrolíferos, tanto a Canadá como a México.
En contraste, el comercio neto en crudo y petrolíferos entre los tres países y el resto del mundo es relativamente modesto.
En el caso del gas natural, generalmente sigue un patrón de flujo de norte a sur en una base neta desde Canadá a Estados Unidos y México.
Una eventual terminación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) le causará afectaciones a la gran mayoría de las empresas con capital alemán establecidas en México, de acuerdo con la Cámara Mexicano-Alemana de Comercio (Camexa).
Sin embargo, no serían consecuencias “dramáticas”, por lo que un alto porcentaje de esas compañías mantendrán sus inversiones en el país, aclaró el organismo.
En una encuesta aplicada entre firmas germanas en territorio mexicano, se concluyó que existe una disposición clara a seguir invirtiendo en México, con 68% respondiendo afirmativamente, mientras que 55% creará empleos, a pesar de que 69% de las compañías tendría afectaciones si se cancela el acuerdo.
“No serían consecuencias dramáticas, ya que entrarían en vigor los aranceles estipulados por la Organización Mundial de Comercio. Para la exportación de productos industrializados a Estados Unidos prevén un arancel de 2.5% en promedio, lo que no encarecería demasiado los productos en el mercado estadounidense”, dijo el director general de Camexa, Johannes Hauser.
De acuerdo con el directivo, las tarifas arancelarias que estipula la OMC para la exportación desde México a Estados Unidos son mínimas en la gran mayoría de los productos industriales, por lo que podría mantenerse la actividad exportadora.
Sin embargo, el factor que más preocupa a las firmas alemanas que operan en México es la inseguridad en sus operaciones diarias.
Sobre ese tema, 11% consideró “que el problema es muy relevante, lo que contrasta porque a fines de 2016 fue 6%”, según el sondeo.
La inseguridad se considera como relevante para 45% de los empresarios, 4% más que a finales de 2016. En tanto, para 44% el tema no es relevante.
De acuerdo con la encuesta, subió de 62% a 68% el porcentaje de las empresas socias de Camexa que invertirán en 2018.
Respecto a las empresas que proyectan crear nuevos empleos, hay un aumento de nueve puntos porcentuales, a 55%, respecto a las firmas que consideraban hacerlo a finales de 2016.
En la edición 2017 de la encuesta coyuntural, la cual se realizó a fines de noviembre, 65% de los socios de la Camexa aseguró que aumentaron sus ingresos, mientras que 16% tuvo un desempeño estable en comparación con 2016. En tanto, 11% dijo que empeoró su situación y 9% dijo que empeoró notablemente.
“Los empresarios ven viable un escenario en el que México aproveche mejor el potencial de los otros tratados de libre comercio, entre ellos el acuerdo con la Unión Europea”, destacó el sondeo.
Además, 57% consideró que México será exitoso en diversificar su comercio exterior dentro de los dos próximos años y 82% asume que lo ampliara a largo de los años.
“No serían consecuencias dramáticas [si se termina el TLCAN], ya que entrarían en vigor los aranceles estipulados por la OMC” JOHANNES HAUSER Director general de Camexa