Le dan su Día de Reyes al campeón
Tigres inicia el torneo con la garra izquierda al perder con Puebla
Puebla.— Los Tigres aún no despiertan. Fue tanta su fiesta, tras coronarse en la última final regia que decidió echarse a la hamaca para resentir los severos síntomas de la campeonitis.
Puebla lo aprovechó. Con mayor entrega y talento, victimó a un monarca de la Liga MX que no quiso demostrar su potencial, quizá porque sigue en su festejo.
Un 2-1 que fue justo para La Franja. Un premio merecido, porque en el terreno de juego del estadio Cuauhtémoc tuvo los arrestos para no intimidarse frente al millonario plantel felino. Así, dio un paso tempranero hacia la permanencia en la Primera División.
Como suelen ser los equipos dirigidos por Enrique Meza, el Puebla quiso tener el balón y darle un buen paseo.
Sin embargo, la apertura en el marcador, la logró mediante un rechace de Nahuel Guzmán, que dejó sólo a Brayan Angulo, quien sólo
empujó la pelota a la portería del vigente campeón (26’).
Tigres encontró la igualada. Nunca la buscó, porque se le notaba que poco le interesaba el duelo, pero la obtuvo.
Fue mediante un error monumental de Moisés Muñoz. El portero camotero no pudo retener el balón ante un centro frontal. Para ponerle mayor acento a su ridículo, el esférico se le escapó por debajo de las piernas y Enner Valencia provechó para el 1-1 (44’).
Puebla volvió a apretar, al querer con mayor vehemencia las tres unidades. Pudo irse al frente en un polémico gol fantasma.
Al final, cuando faltaban poco más de 10 minutos para el fin del juego, Francisco Acuña cruzó a Nahuel Guzmán para el 2-1. Gol de oxígeno, gol que indicó que el campeón sigue dormido.
“Puede ser una buena excusa [la falta de pretemporada], no sabemos hasta cuándo nos va a durar. Jugamos demasiado para atrás” RICARDO FERRETTI Técnico de Tigres