«EL CONSUMIDOR NACIONAL ESTÁ ABRIÉNDOSE MÁS AL VINO MEXICANO»
El enólogo Jesús Rivera Covarrubias, nacido en el Valle de Guadalupe, dice orgulloso que por sus venas corre el vino, pues las tres generaciones que lo anteceden se dedicaron a los viñedos y su producción. Por ello, desde siempre estuvo involucrado en estos temas, que en las últimas dos décadas han tenido gran auge en nuestro país.
¿Cómo ves el mundo vinícola en México de 20 años para acá? —La enología y la viticultura han avanzado de una manera extraordinaria en nuestro país. Los vinos que ahora se están elaborando en las grandes bodegas, cuentan con la calidad de un buen viñedo y son manejados con las mejores técnicas de viticultura. Esto ha hecho que tengamos mejores frutas, mejores maduraciones con mayor identidad, y no se diga en el tema de la enología. Por otra parte, creo que el consumidor nacional día con día está abriéndose más al vino mexicano.
¿En qué posición están los vinos que contribuyes a elaborar? —Nuestros vinos en el Valle de Guadalupe, sobre todo los de Vinícola El Cielo, están en una etapa de gran crecimiento y en la que existe un gran interés por el proceso de hacer vino. La gente que acude a nuestra bodega se lleva un concepto distinto, otra imagen del vino de Baja California. Yo creo que la calidad es lo que nos está abriendo las puertas; nos ha llevado a estar en el top, pues somos la quinta o sexta bodega de mayor producción de todo el país en el poco tiempo que tenemos produciendo, unos cuatro años.
¿Cuáles son las características de estos vinos y cuál es tu participación en su elaboración? —Prácticamente soy el enólogo de la Bodega, pero también manejo el tema del trabajo en el viñedo. Tenemos a dos grandes agrónomos y ha sido un equipo muy interesante. Lo que estamos haciendo es buscar producir nuestra propia uva para, con ella, elaborar nuestro vino.
En El Cielo tenemos 22 hectáreas plantadas que apenas empezaron a producir. Ahora compramos nuestra materia prima en los valles de San Vicente, Ojos Negros, Santo Tomás y en el de Guadalupe. En el 2017 plantamos 10 hectáreas más y, arrancando el 2018, sumaremos entre 60 y 75. Le estamos apostando, basándonos en nuestro crecimiento, a producir nuestra propia uva. En unos cuatro o cinco años más ya estaremos teniendo resultados.
¿Qué líneas tiene El Cielo? —Arrancamos con tres: Astrónomos, con etiquetas monovarietales, mezclas o blend; después Astros, que al igual que la primera son vinos para un consumo rápido; los de Constelaciones se elaboran para que evolucionen en la botella de cuatro a 10 años; y los Estrellas o Premium son diseñados para una guarda que va de los 10 a los 20 años.
Tenemos cuatro líneas de las que se derivan casi 18 etiquetas.
¿Las cepas protagonistas?
Las más importantes son Cabernet Sauvignon, Tempranillo, Nebbiolo y ahora la Syrah, eso en las tintas; en las blancas solo tenemos dos, Sauvignon Blanc y Chardonnay. En este tema estanos preocupados por mantener la calidad.
¿Los principales competidores de los vinos mexicanos?
La tendencia sigue siendo alta en el consumo del vino español, argentino y chileno. Lamentablemente, no es una lucha muy equitativa; en esos países es otro el tema del consumo del vino, para ellos es una industria importante y tienen que exportar su producto porque cuentan con una gran producción.