Los murales, sin riesgos ni daños, indica especialista

••• “No hay ningún daño que ponga en riesgo la estabilidad estructural de los murales. Los murales no sufrieron daños derivados del incendio. Al mural de Siqueiros y de Amado de la Cueva no le pasó absolutamente nada, y a los murales que están en la planta baja, en el llamado Olimpo House, lo único que les sucedió es que tienen una pequeña capa de hollín”, dice Ernesto Martínez, director del Centro Nacional de Conservación y Registro del Patrimonio Artístico Mueble (Cencropam).

En breve, el Cencropam iniciará un proyecto de restauración de la obra mural de la Biblioteca Iberoamericana Octavio Paz, pero lo harán no porque haya daños derivados del incendio, sino porque así lo habían previsto desde septiembre de 2017, cuando realizaron un dictamen a petición de la Universidad de Guadalajara.

Martínez indica que en septiembre le presentaron a la UdeG un proyecto de restauración que tendrá un costo de 2 millones 98 mil pesos. “Tenemos programado trabajar cuatro meses; intervendrán dos restauradores de Cencropam y ocho técnicos contratados por honorarios que apoyarán en esta labor”, señala.

Asegura que tras la inspección ocular que realizó un perito del área de murales, el 5 de enero, confirmaron que no hay ninguna afectación a los murales y que la única diferencia tras el sismo es que ahora, además de la capa de polvo que tenían, presenta una pequeña capa de hollín, “pero eso no daña de ninguna manera los murales”.

El director del Cencropam afirma que el mural Ideales agrarios y laboristas de la Revolución de 1910, realizado por David Alfaro Siqueiros y Amado de la Cueva, que mide 480 metros cuadrados, tiene pequeñas perdidas de soporte y capas de color y de polvo suelto, pero son previo al incendio; y que en los murales del Olimpo House, de autoría de Jesús Guerrero Galván, José Parres Arias, Alfonso Michel y Francisco Sánchez Flores, tienen deterioros similares.

Lo único que requieren estas obras son trabajos de limpieza y de mantenimiento.