La vida es mejor a los 50
1968 fue un año convulso con revoluciones sociales e ideológicas y grandes obras artísticas, reflejo de una era que invita a la nostalgia.
En la música, The Beatles lanzaban su álbum homónimo, conocido cariñosamente como The White Album y clásico indiscutible de la cultura pop; en el cine, Stanley Kubrick desafiaba los parámetros con 2001: Odisea del espacio; Philip K. Dick reinventaba la ciencia ficción literaria con ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? (inspiración de la película Blade Runner), y en la pintura Mark Rothko firmaba sus últimas obras, pues dos años después pondría fin a su vida y a toda una época en esa disciplina.
La relojería no se quedó atrás en la explosión creativa de ese año. Jaeger-LeCoultre presentó la versión más conocida de su modelo Memovox Polaris, heredero directo del Memovox Deep Sea, el primer reloj de buceo con alarma para que los submarinistas recordaran el tiempo que llevaban bajo el agua. Aún era la edad de oro de los relojes-herramienta que acompañaban a los exploradores en sus aventuras.
Además de la alarma, el Memovox Polaris se destacaba por su diseño funcional y gran legibilidad, muy útil para los submarinistas; por las tres coronas, y por la construcción supercompresor de la caja, que aseguraba más hermeticidad a mayor profundidad.
Jaeger-LeCoultre ha aprovechado el aniversario cincuenta de este reloj para lanzar una nueva colección llamada Polaris, que está compuesta por un reloj de carga automática; un automático con fecha; un cronógrafo, y un cronógrafo con hora mundial.
Pero la estrella de esta línea es el Polaris Memovox Limited Edition, una edición limitada a mil unidades que rinde tributo al guardatiempo de 1968. Claro, cuenta con la función de alarma; las tres coronas (la de arriba para programar la alarma; la del centro para el bisel giratorio interior, y la de abajo para ajustar la hora); el Super-Luminova color vainilla; los índices trapecio; los cuatro números arábigos; y el triángulo que indica el despertador.
En el interior de su caja de 42 milímetros hecha de acero inoxidable, lleva el mecanismo automático calibre 956, que ofrece 44 horas de reserva de marcha. La esfera es negra con tratamiento soleado, granallado y opalino, como el original. Es sumergible hasta 200 metros y está equipado con una correa de caucho negro.
Las claves Mecanismo: Carga automática. Funciones: Horas, minutos, segundos, fecha y alarma.