La biografía de Altamirano en los archivos de Sotelo Inclán
Mario Casasús publica el primero de dos volúmenes facsimilares del documento que contiene correcciones y notas al pie
La misma metodología con la que Jesús Sotelo Inclán escribió su célebre biografía Raíz y razón de Zapata, publicada en 1943, fue la que el historiador utilizó para escribir la biografía sobre Ignacio Manuel Altamirano, que quedó inconclusa en 1993, cuando murió en un accidente automovilístico. El manuscrito de esa biografía inédita fue hallado por el escritor y periodista Mario Casasús, quien acaba de publicar el primero de dos volúmenes facsimilares de esa biografía bajo el título El archivo inédito de Jesús Sotelo Inclán.
Anotaciones en lápiz, de puño y letra de Sotelo Inclán; correcciones, borrones y anotaciones con pluma; agregados y notas al pie de página o en los márgenes; datos nuevos, como que en realidad Manuel Altamirano no anduvo recorriendo el país como apuntador de obritas de teatro o en un circo —como siempre se ha creído— son algunos de los hallazgos que contiene este manuscrito que se presentará hoy en Tixtla, Guerrero, pueblo natal del autor de El Zarco.
Casasús dice que en la biografía que el autor dejó inédita hay hallazgos sobre todo de la infancia y juventud de Ignacio Manuel Altamirano.
Es un manuscrito en cinco carpetas. “Sotelo Inclán dividió en etapas la vida de Altamirano, una vida que fue muy amplia, fue procurador general de la República, presidente de la Suprema Corte, diplomático, una de las personas que entrevistó a Maximiliano una vez que el emperador fue detenido en Querétaro; su biografía es impresionante y no la puedes abarcar en una sola entrega. Este primer volumen de 2018 va desde su nacimiento en 1834 hasta sus estudios preparatorianos en el Instituto Literario de Toluca en 1852”, señala Casasús.
El periodista que halló el manuscrito que ha sido coeditado por Libertad Bajo Palabra y Archipiélago dice que Sotelo Inclán quería que la biografía se titulara Raíz y razón de Altamirano, con el mismo título y metodología de Raíz y razón de Zapata. “En esta biografía de Altamirano, Sotelo Inclán justifica la metodología y hasta hace una relación entre los hacendados que combatió Zapata en la Revolución con el hacendado de Cuautla que fue benefactor de Altamirano”.
El periodista asegura que la biografía de Altamirano es fácil de construir porque fue un personaje muy público, sus cartas se pueden rastrear en la Hemeroteca Nacional y sus archivos en la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, pero los periodos de juventud, que van desde su infancia en el pueblito de Tixtla hasta su salida a Toluca, eran la parte más confusa.
“Los primeros biógrafos de Altamirano, los del siglo XIX, que a su vez eran sus discípulos, como González y Obregón y Juan de Dios Peza, especulaban que Altamirano recorrió el país dando obras de teatro como apuntador, es una línea apasionante pero es llevar el romanticismo al extremo; lo que ahora puedo precisar con el aporte del manuscrito de Sotelo Inclán es que después de Toluca, definitivamente Altamirano fue a Morelos a trabajar a la Hacienda de Santa Inés, con un español de nombre Luis Robalo y ese español le va a conseguir lugar en el Colegio de San Juan de Letrán”, señala Casasús.
Luego agrega que otro dato que no se conocía es que además el hijo de ese hacendado va a ser el mejor amigo de Altamirano durante toda su vida y que existen cartas que lo confirman. Otro hallazgo es que Sotelo Inclán encontró el primer periodiquito escolar donde Altamirano escribió sus primeros poemas en 1851, tenía menos de 20 años, unos poemas muy malitos pero donde le da la bienvenida al gobernador Mariano Riva Palacio.
“Lo que yo logré investigar es que Altamirano se casó con una sobrina de Mariano Riva Palacio, encontré las cartas donde Altamirano le habla de tú a tú a Riva Palacio, le manda saludos de Margarita; además no olvidemos el componente indígena, Altamirano venía de un lugar aislado, de Tixtla, que sigue siendo un lugar aislado al lado de la Escuela Normal de Ayotzinapa, en esa época no había transporte público y literalmente tuvo que bajar del cerro caminando”, señala Casasús.
El periodista que publicará en 2019 la segunda parte del manuscrito de Sotelo Inclán dice que desde su juventud se puede ver la determinación de Altamirano. Por ejemplo, cuando Tixtla dejó de pertenecer al Estado de México, pues se funda el estado de Guerrero, lo dejan sin beca en Toluca, ya es un guerrerense, pero él decide quedare en Toluca dando clases.
“Por eso es importante esta primera entrega de la biografía, porque son los años más desconocidos de Altamirano, después se vuelve muy obsesivo y en cada carta pone la fecha de cuándo la respondía. Por eso me parece fascinante saber que el primer poemita que nadie había leído de Altamirano, un poemita escolar, esté dedicado a Mariano Riva Palacio, y que el hacendado Luis Robalo fue su mecenas”, afirma Casasús.
Con el manuscrito de la biografía inédita realizada por Jesús Sotelo Inclán se puede desmontar el mito de que “Altamirano anduvo en una compañía de teatro como vagabundo, cirquero o apuntador de obritas por todo el país, que es lo que especularon sus biógrafos que lo conocieron pero que no se atrevieron a confrontar a su maestro y preguntarle ¿qué hacía usted de joven?”.