La experiencia
Independientes que buscan compartir ideas, servicios y la atmósfera laboral
Si estás arrancando tu negocio y necesitas una oficina pero no tienes los fondos suficientes para rentar una propia, tal vez es momento de que analices el concepto del coworking, una alternativa para tus necesidades laborales, aunque sin pagar renta completa ni todos los servicios que esto conlleva.
Los espacios de coworking son oficinas compartidas, donde profesionales y emprendedores laboran bajo un mismo techo, tratan de conectarse entre sí y encontrar otras oportunidades de desarrollo.
En esta modalidad de oficina no solo compartes gastos, también formas parte de una comunidad de profesionales dispuestos a intercambiar ideas y a colaborar en nuevos proyectos.
Luis de Cristóbal, economista y escritor, autor del libro La revolución individual, considera que son múltiples los beneficios que puede aportarte una comunidad de esta naturaleza, de la cual es parte, igual que millones de jóvenes en el planeta.
“El coworking es un espacio compartido y destinado, por un lado, a funcionar como oficina pero con menos gastos y, por el otro, a tener la posibilidad de hacer networking o contactos con personas de tu mismo sector u otro, o de cualquier ecosistema dentro del emprendimiento”, señala el economista.
Explica que él emplea el coworking con diferentes fines. Primero, para tener un lugar fijo como una oficina o una dirección postal, que quizá ahora no es tan importante pero hace una década sí; en segundo lugar, para acceder a cursos y talleres sobre diferentes temas.
“Estos espacios los usé en Madrid y ahora en México; la diferencia entre ambos es el tiempo, porque este concepto comenzó a utilizarse en Madrid hace muchos años y aquí, en México, apenas se encuentra en auge”, comenta.
Añade que, desde que él conoció el concepto hasta la fecha, éste ha evolucionado. “Antes se hacía en espacios no tan grandes, muchas veces eran oficinas compartidas más que un espacio de intercambio de conocimiento. Hoy te dan la posibilidad de conocer a personas más interesantes y eso ha hecho que el concepto atraiga más a la gente, porque te da la oportunidad de conocer otros pensamientos, otras ideas”, asegura.
Destaca que “a mí, originalmente, no me funcionó porque era un espacio pequeño, donde todo mundo quería vender, pero ahora es más interesante porque ya puedes acceder a más prestaciones, como cursos, talleres y capacitaciones, Internet
“Cuando acuñé el término ‘coworking’, estaba describiendo el fenómeno de: trabajar juntos como iguales. Se trataba de explorar cómo poner en práctica mis conocimientos anteriores y mis experiencias en pro de la facilitación del trabajo” —Bernard DeKoven diseñador de videojuegos, escritor y padre de los espacios de trabajo compartido.