Curules de San Lázaro se pintan de violeta
En cada uno de los lugares se colocaron rosas para celebrar a las diputadas
Las curules de San Lázaro se pintaron de violeta. En cada uno de los lugares que ocupan los diputados federales se colocó una papeleta morada en la que se les invitaba al evento en conmemoración del Día Internacional de la Mujer, un botón del mismo color y dos libros.
“Los derechos humanos de las mujeres, Ejercicio y exigibilidad” fue un regalo del secretario general, Mauricio Farah; y “Hermila Galindo, Sol de libertad”, de la presidenta del consejo editorial, Emma Alemán.
En los asientos que correspondían a las diputadas, además, se colocaron rosas, obsequio del diputado Tony Meléndez. Pero de todas las legisladoras, sólo la presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, Laura Nereida Plascencia, se vistió de morado. El primero en emitir un mensaje en el marco del día que se celebra cada 8 de marzo, fue el panista Javier Bolaños, quien hizo un exhorto público a los candidatos a la Presidencia de la República para que “aquel que reciba la mayoría de votos en los próximos comicios”, haga el esfuerzo de integrar en su gabinete por igual a las mujeres que a los hombres.
El presidente, Edgar Romo García, dio luz verde a la pasarela de mensajes en torno al Día Internacional de la Mujer que se celebra cada 8 de marzo. Las diputadas Nancy López Ruiz, de Encuentro Social; Angélica Reyes Ávila, de Nueva Alianza; María Candelaria Ochoa Ávalos, de Movimiento Ciudadano; y Lía Limón García, por el partido Verde Ecologista, fueron las primeras en tomar la palabra.
Terminaron con el protocolo las legisladoras Maricela Contreras Julián, de Morena; Hortensia Aragón Castillo, del PRD; Karla Karina Osuna Carranco, de Acción Nacional; y Monserrat Alicia Arcos Velázquez, del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Contreras Julián inició con un cuestionamiento, “¿Cómo subir a la tribuna y no reclamar?”, así que reclamó al presidente Enrique Peña Nieto que miente, cuando afirma “que las mujeres vivimos en una realidad distinta a la del pasado”.
Los legisladores iban y venían, fueron desapareciendo conforme avanzó el orden del día. Se pasearon frente a las cámaras con temas de importancia nacional y local, ofrecieron una sonrisa. El día transcurrió como cualquier otro.
Sonó la campana, la sesión había terminado, ¡todos fuera del búnker!, para arreglar pendientes, sobre todo el de la dieta, y una que otra cosilla. Pasó una mujer que forma parte del staff de la Comisión de Igualdad a recoger los botones con la leyenda “8M” y los hashtag #YoTambién, #NiUnaMenos, #VivasNosQueremos. “Qué lástima, nadie los quiso”, comentó para sí misma.