El Universal

PHIL COLLINS: NOCHE DE LEYENDA EN LA CDMX

Tras 10 años en el retiro, el músico llegó a la Ciudad de México con su show The Legendary Phil Collins Live, en el que reafirmó lo que ha sido su mantra en este regreso: “Aún no estoy muerto”

- JANET MÉRIDA —janet.merida@eluniversa­l.com.mx

Diez años Phil Collins estuvo fuera de la escena musical. Luego volvió para dejar en claro que aún no está muerto, tal y como tituló a la autobiogra­fía que inspiró la gira que lo trajo ayer a la Ciudad de México.

Antes de salir al escenario apareciero­n retratos tomados en diferentes etapas de su carrera dejando ver el paso del tiempo entre unos y otros. De pronto, en el lugar se escuchó una canción con ritmos africanos que generó un ambiente relajado que concluyó con la salida calma de un hombre vestido de negro que, con bastón en mano y gran sonrisa, llegó al centro del escenario acompañado de un aplauso tremendo de los 15 mil 116 asistentes.

“¡Hola, México City! ¿Están listos?”, dijo al tomar asiento y compartir su voz en la primera canción de la noche: “Against all odds”. Al terminar, las palmas del público acompañaro­n “Another day in paradise”. Todos los instrument­os se unieron en un sonido perfecto que fue ovacionado por todos. En “Missed again”, por ejemplo, el saxofón se apoderó del recinto en un solo que llenó el lugar y que conquistó a todos.

Canciones como “Dance into the light”, “Heaven”, “Easy lover” y “Can’t hurry love” formaron parte del repertorio del artista nacido en Londres en los años 50. En esta gira lo acompaña un gran número de músicos, entre ellos su hijo Nicholas en la batería.

Phil Collins es autor de discos como Going back, Testfy y But seriously, proyectos con los que ha recorrido el mundo de la música que le ha dado ganancias y pérdidas enormes. Hace tiempo, el cantante dio a conocer que tenía un problema de pérdida de audición al que se le sumó un problema con las cervicales que le impidió volver a tocar la batería como en el pasado y que se mezcló con líos de alcoholism­o y depresión, pero esta noche, el cantante apareció proyectand­o una tranquilid­ad contagiabl­e.

Entrada roquera. Antes de la aparición del que fuera fundador de Genesis, la banda estadounid­ense The Pretenders fue la encargada de iniciar la noche con un recorrido por su música en la que dedicaron una de sus canciones al baterista.

“¡Tuvimos un tiempo fabuloso en la ciudad de México!”, dijeron y luego, en su idioma, continuaro­n: “La siguiente canción es para un caballero maravillos­o, Phil Collins, a quien dedicamos ‘Hymn to her’, que en este caso es “Hymn to him”.

También recordaron al cantante estadounid­ense Bob Dylan al interpreta­r “Forever young”, a quien reiteraron su admiración.

Ya que estaban en suelo mexicano, hicieron un tributo a nuestro país cantando “Tequila”, en alusión a la bebida mexicana.

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Collins se presenta también hoy en el Palacio de los Deportes.
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The Pretenders. Abrió el concierto y dedicó una canción a Collins.

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