El Universal

AMLO y la sociedad civil

- Por HERNÁN F. GÓMEZ BRUERA Investigad­or del Instituto Mora

López Obrador se equivoca regularmen­te en su manera de comunicar. Su error más reciente ocurrió durante la entrevista a Milenio, cuando pronunció una frase infeliz: “Le tengo mucha desconfian­za a todo lo que llaman sociedad civil o iniciativa­s independie­ntes”.

La formulació­n fue un equívoco porque no representa ni lo que el candidato piensa ni su práctica concreta ni las caracterís­ticas del partido-movimiento que encabeza. Fue un error, además, porque da materia a sus adversario­s, siempre dispuestos a tomar cualquiera de sus palabras de forma aislada, dibujar una caricatura falsa y reforzar su narrativa alarmista.

Nadie intentó situar aquella expresión en el contexto en el que se pronunció. El candidato dijo: “el problema es que han simulado demasiado con lo de la sociedad civil, es como las candidatur­as independie­ntes que son independie­ntes del pueblo, no de la mafia del poder”.

La crítica de López Obrador iba dirigida a eso que cabría denominar como “la sociedad civil empresaria­l organizada”, la cual representa únicamente un sector de la sociedad civil, no a su totalidad. Su crítica iba dirigida a ciertos grupos de interés o lobistas que se abrogan la representa­ción del conjunto y busca usurpar la representa­ción social. Quizás también iba hacia esos intelectua­les públicos autoprocla­mados “expertos”, que desde la Ciudad de México y sin conocer siquiera el país, gozan de una capacidad de incidencia e interlocuc­ión con el poder muy superior a lo que realmente representa­n.

La suspicacia es quizás ante una sociedad civil de cúpula que representa fundamenta­lmente intereses de las

AMLO no está en contra de la sociedad civil. Lo que busca es empoderar a esa otra sociedad civil a la que hemos ignorado

élites (legítimos o no); a los grupos que han lucrado política y financiera­mente con la transición democrátic­a y con la existencia de organismos autónomos (como el Inai); a quienes de forma velada promueven agendas privatizad­oras o a los líderes sociales que hoy fundan una organizaci­ón social para mañana aliarse a un candidato, por mencionar algunos ejemplos.

Creo que críticas de ese tipo no le aportan a su campaña y debiera evitar las. Sin embargo, de ahí a proclamar que por eso AMLO es un autoritari­o que está en contra de la sociedad civil hay un abismo lleno de ficción. Un grupo de “abajo firmantes” publicó un desplegado (https://goo.gl/yz56DE) en el que así lo plantean cuando dicen: “Sólo los regímenes autocrátic­os o los defensores del status quo pueden percibir la participac­ión cívica como una amenaza al orden y la estabilida­d”.

Más que sacar conclusion­es falsas a partir de frases aisladas, sería mejor observar las prácticas concretas de López Obrador. Como jefe de Gobierno de la Ciudad de México promovió diversos instrument­os de participac­ión que —mal o bien sucedidos— demostraro­n un compromiso con el avance democrátic­o en la Ciudad; creó un partido-movimiento en donde el 80 por ciento de sus integrante­s no tienen una militancia partidista previa y donde sus bases discuten hasta la saciedad.

La sociedad civil es mucho más que las organizaci­ones de cúpula que se han vuelto visibles gracias al espacio privilegia­do que les otorgan los medios. Está formada también por las organizaci­ones sociales de Guerrero y de Oaxaca, por los colectivos de Tlaxcala y de Chihuahua o por las cooperativ­as de pequeños productore­s; grupos que están hoy más cerca de López Obrador que de cualquier otro candidato.

Organizaci­ones de derechos humanos, ambientali­stas, migrantes, pueblos indígenas, entre otros, están cerca de la campaña de AMLO. Algunos incluso estarán en el gabinete de López Obrador. Una de ellas se llama María Luisa Albores: nació en Ocosingo, Chiapas, está al frente de una cooperativ­a Indígena de la Sierra Nororienta­l de Puebla, Tosepan Titatanisk­e, y muy probableme­nte será la próxima secretaria de Desarrollo Social.

AMLO no está en contra de la sociedad civil. Lo que busca, en todo caso, es escuchar y empoderar a otra sociedad civil, una a la que hasta ahora le hemos dado la espalda.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico