Narcomenudistas pelean a sangre y fuego el sur de la CDMX
• CDMX levantará el edificio que fue demolido tras el sismo de 19-S
Grupos delictivos de Tláhuac y Xochimilco se disputan el control del narcomenudeo en las delegaciones Coyoacán, Tlalpan e Iztapalapa, de acuerdo con reportes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) capitalina.
El pasado domingo seis personas fueron ejecutadas en dos hechos diferentes, pero relacionados con la lucha por el tráfico de drogas.
El domingo por la mañana, presuntos integrantes del Cártel de Tláhuac secuestraron a dos jóvenes, de 20 y 17 años, ligados a la banda de Los Rodolfos, de Xochimilco, a quienes torturaron y les dieron el tiro de gracia.
Integrantes de Los Rodolfos identificaron a los agresores y por la noche del mismo domingo tomaron venganza: balearon con cuernos de chivo a cinco personas, de las cuales cuatro murieron y una se reporta grave.
Miguel Soria, jefe del Estado Mayor Policial de la SSP, reconoció la disputa entre bandas delictivas en el sur de la ciudad y dijo que han amenazado a integrantes de la corporación a través de narcomensajes en los que exigen dejarlos trabajar o los matarán.
Autoridades advirtieron que la pelea entre grupos criminales se intensificó tras la muerte de El Ojos.
En 15 días, el Instituto de Vivienda de la Ciudad de México (Invi) iniciará la reconstrucción del edificio ubicado en Doctor Lucio 103, conocido como Osa Mayor, afectado y demolido a consecuencia de los sismos de septiembre del año pasado.
José Ramón Amieva, jefe de Gobierno capitalino, indicó que en un lapso de siete meses se tendrá lista la obra negra e iniciarán con los acabados finales. En total, serán 71 departamentos los que se edifiquen en el lugar, “con los mismos metros cuadrados que tenían y mejores condiciones de construcción”.
En el lugar que ocupó el edificio de 60 metros de altura, el mandatario entregó el “predio liberado que está en aptitud técnica de ser reconstruido. Después se transmite esa estafeta, esa obligación al Instituto de Vivienda de la Ciudad, para que de una manera eficiente y honesta lo puedan llevar a cabo”.
Amieva Gálvez explicó que para este esquema de reconstrucción, las familias accederán a un crédito del Invi con un plazo de 15 a 25 años, que será pagado en mensualidades calculadas de acuerdo con los ingresos de cada una de las familias.
“Por ejemplo, para una persona mayor que cuenta con su tarjeta de pensión alimentaria le representa aproximadamente 400 pesos al mes, por eso señalábamos que son créditos individuales. No se trata de generar un costo oneroso, una carga muy fuerte para la economía de las personas, si no que lo vean ellos como un acompañamiento”, dijo.
La demolición del edificio Osa Mayor estuvo a cargo de la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse), la cual se realizó en un lapso de 80 días y concluyeron el pasado 8 de abril.
El conjunto habitacional se conformaba de dos torres de 16 niveles (planta baja, 14 pisos de departamentos y un nivel que albergaba cuartos de servicios y elevadores); la torre norte sufrió un desplome o inclinación que provocó la separación de las escaleras hasta dos metros en los niveles más altos.
Centauro. Contiguo al predio que ocupaba el edificio Osa Mayor está el inmueble Centauro, que también resultó afectado por los sismos y aún está a la deriva, debido a que, explicó el jefe del Gobierno, hay dos dictámenes, uno particular que refiere que presenta daño estructural y puede ser sujeto a reforzamiento, pero el realizado por parte de Gobierno dice que lo mejor es que se demuela y que se reconstruya el inmueble.
Amieva expuso: “Tendríamos que ver qué resulta menos costoso, probablemente reforzar sea más costoso que demoler y volver a reconstruir; esa es la mesa que vamos a tener con ellos, para ofrecerles las alternativas. Es una decisión que deben de tomar los vecinos [pues por ahora se encuentran divididos por este tema] y nosotros apoyaremos lo que ellos acuerden”.
“El predio liberado [donde estaba la Osa Mayor] se encuentra en aptitud técnica de ser reconstruido”
“Después se transmite la estafeta [para la reconstrucción], esa obligación, al Instituto de Vivienda de la Ciudad para que de una manera eficiente y honesta la lleve a cabo” JOSÉ RAMÓN AMIEVA Jefe de Gobierno de la CDMX