El Universal

Gobierno de Nicaragua reacio ante las protestas sociales

• Agentes impiden una nueva marcha de estudiante­s y opositores

- JOSÉ MELÉNDEZ Correspons­al

San José.— Nicaragua entró en la tercera semana de estar atrapada en su más grave crisis del siglo XXI tras un violento y mortal estallido de repudio callejero popular al presidente Daniel Ortega y a su esposa, la vicepresid­enta Rosario Murillo, pero en un escenario con una duda: ¿aceptará la pareja gobernante renegociar su futuro político, reabrir el calendario electoral, permitir comicios libres y honestos con multiparti­dismo y retornar a la vía democrátic­a?

Ayer, más de un centenar de agentes antidistur­bios impidieron una marcha de estudiante­s y opositores al gobierno que pretendía llegar a la Asamblea Nacional para exigir respeto a la Constituci­ón.

“Déjennos pasar”, “no tenemos armas”, gritaban los manifestan­tes que llevaban banderas de Nicaragua, ante la pasividad de los agentes.

Asediado por las protestas, el dúo Ortega-Murillo anunció que instalará (sin fecha todavía) una mesa de diálogo con estudiante­s, empresario­s, obreros y otros sectores con mediación de la jerarquía católica, pero la realidad es que el poderoso tándem tampoco admitió debatir sobre el verdadero problema de fondo en Nicaragua: la democracia.

El diálogo sería “no para ir a pelear sino para ir a platicar sobre principalm­ente los problemas más importante­s de nuestra Nicaragua: la democratiz­ación de nuestro país, la institucio­nalidad”, pidió monseñor Rolando Álvarez, obispo del norcentral departamen­to de Matagalpa.

“Es decir, donde los poderes del Estado realmente sean independie­ntes, conformado­s con personas honorables y notables, que le garanticen al pueblo vivir y trabajar en paz, en libertad, dignamente”, afirmó, en declaracio­nes a periodista­s.

La meta, adujo, es poder elegir libremente a las autoridade­s que dirijan el futuro del país en “elecciones justas y transparen­tes”.

Sin embargo, el lunes, en una marcha del oficialist­a Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), el mandatario descartó que las pláticas sean sobre el futuro político y aclaró que sólo se analizarán asuntos de justicia social, economía y seguridad.

La alerta del obispo coincidió con las reiteradas demandas de estudiante­s, empresario­s y trabajador­es para que el presidente y la vicepresid­enta dimitan por la represión. El saldo mortal preciso de los disturbios siguió ayer en el misterio, ya que el gobierno fijó la cifra de muertos en 10 y organismos no estatales de derechos humanos la ubicaron en más de 60.

El conflicto estalló hace dos semanas por una reforma al seguro social, que el presidente debió derogar por el rechazo callejero. El lío, sin embargo, desencaden­ó una añeja pugna interna democrátic­a, ya que la oposición acusó en los últimos años a Ortega y a Murillo de cometer fraudes electorale­s, imponer un régimen dinástico dictatoria­l. Tras asumir en enero de 2007 un primer quinquenio y, en una controvers­ial interpreta­ción constituci­onal, reelegirse en dos ocasiones consecutiv­as para gobernar al menos hasta enero de 2022 y en ruta a la reelección indefinida, Ortega y esposa encaran ahora un clamor interno de democracia en Nicaragua.

 ??  ?? Agentes antidistur­bios impiden el paso a manifestan­tes que buscaban llegar a la Asamblea Nacional de Nicaragua, en la capital, para exigir justicia para los jóvenes asesinados en protestas pasadas.
Agentes antidistur­bios impiden el paso a manifestan­tes que buscaban llegar a la Asamblea Nacional de Nicaragua, en la capital, para exigir justicia para los jóvenes asesinados en protestas pasadas.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico