Postres rústicos o veganos. Gustos que no dan culpa
Tener conciencia del medio ambiente y la relación que vives con tu cuerpo no debe ser impedimento para consentirte con algo dulce.
Eisberg helados rústicos, en el Centro, presume el lema de “producto totalmente transparente, orgánico y saludable”, es por eso que muestra todos los ingredientes en su barra. Esto da la oportunidad a los clientes de crear el sabor sus helados y estar presente al momento de su preparación. No cuentan con conservadores, colorantes o endulzantes artificiales.
El café es nacional, y las frutas y verduras que utilizan para sus platillos son de temporada.
No te tienes que preocupar si pides algo para llevar: los popotes que utilizan son de cartón, las charolas son de paja y las cucharas de fécula de maíz. Volviéndolos biodegradables y reduciendo el consumo de plástico; lo que genera conciencia en sus consumidores acerca de la relación que tenemos con el medio ambiente.
Si eres vegano no hay por qué limitarse a pocos sabores, aquí puedes escoger el tipo de leche que deseas para volver todos los helados una opción para probar; cuentan con otro tipo de platillos veganos, siendo una opción para diferentes dietas: sándwiches, baguettes y diferente clase de repostería .
Otra opción es Chomp Chomp, que se encuentra en Río Ebro 89 (Cuauhtémoc), que está comprometido con brindar productos orgánicos; lo más apegado a lo natural. Su variedad de postreS es bastante amplia: galletas, pasteles, malteadas, entre otros.
Su compromiso no sólo es con los clientes también es con el medio ambiente, con envases y bolsas biodegradables. Ofrecen la seguridad de no generar más contaminación.