Esto no es una boda Real
High On Fashion
Seguramente, el tema más importante de este sábado es la boda real y, por alguna extraña razón, a todos nos importa. A mí, la verdad, no me mueve tanto, no más allá de chismear qué llevarán puestos todos los invitados. Lo que sí debo aclarar es que considero muy poético y romántico que alguien encuentre a “ese alguien especial”, tanto como para proponerle pasar la vida a su lado. Ya seas de la realeza o un mortal cualquiera.
Últimamente me la he pasado en bodas (de hecho, una de mis mejores amigas se casó hace tres semanas: ¡felicidades Per y Rich!) Siento que hay mucho conflicto en la vestimenta para dicho evento. Constantemente recibo mensajes de mis amigos confundidos con el tema: qué me pongo si es en jardín, o en playa, si es de noche en la ciudad o en la tarde en una hacienda.
Los hombres son los que colapsan y siento que empiezan a correr en círculos cada vez que reciben una invitación de boda, con el simple hecho de pensar qué ponerse. Mi novio, por ejemplo, ya tiene “su traje de boda” y únicamente le va cambiando la camisa y la corbata, dependiendo de la ocasión. Y en caso de que sea en playa usa el pantalón con una guayabera. ¡Hombres! Lo traigo a colación porque me parece una excelente idea que vayan con un buen sastre y que les haga un buen traje a la medida, de tres piezas, en un color noble como el azul marino o gris ratón. Les hará el paro siempre.
Ahora, si la boda es en la playa usen el pantalón con una guayabera blanca, negra (para algo más formal) o azul claro. Si, en cambio, la boda es de noche en la ciudad pueden llevar las tres piezas y optar por camisa blanca o negra, y corbata gris o negra también. Si la boda es de día o a media tarde en una hacienda o jardín, pueden llevar el traje con dos piezas y combinarlo con una camisa blanca o azul cielo y buscar una corbata más jovial, pero lisa, en tono plata, azul rey o marino. Eviten a toda costa trajes o ensambles en dos colores. Se ve fatal que traigan pantalón azul marino y saco de otro color.
Con nosotras la ecuación se complica pero, como mi espacio es limitado, seré precisa: • Evitar lentejuelas y brillos estridentes en bodas de día, jardín o playa. Esas texturas van mejor para celebraciones por la noche.
• El color vivo siempre irá bien en eventos, en espacios abiertos como haciendas o jardines. La playa es ideal para llevar estampados.
• Eviten los tonos neón para su traje. Jamás he visto un vestido decente en este tono.
• No se vale llevar vestidos de “largo cinturón”, solo van a incomodar a los asistentes.
• Jamás su vestido puede ser blanco o crema; a menos que el ‘dress code’ así lo diga. Me ha tocado ir a bodas donde piden ir de blanco. • Los diseños vaporosos van muy bien en playa y enlaces de día. En cambio, las telas robustas y tonos oscuros van mejor en bodas de etiqueta rigurosa o de noche.
Si tienen duda sobre qué ponerse prefiero que me manden un DM por Instagram a que vayan mal vestidas a una boda. Con cariño, Gina.