Proceso en constante evolución
En el Manual de calles: diseño vial para ciudades mexicanas elaborado por la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU) con apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), se afirma que “el rediseño de las calles de una ciudad es un proceso en constante evolución. Generalmente, los cambios en estas vías toman mucho tiempo, al requerir una fuerte inversión en estudios técnicos y construcción”.
Al parecer, el periodo prolongado de las obras de adecuación del deprimido que permite el acceso fluido al desarrollo, tanto como la construcción de los edificios en sí, afectó el tráfico en la zona que, ya desde el año pasado, ha provocado continuas quejas de peatones y automovilistas, debido al complicado problema de movilidad originado en esta área.
El 2 de junio del año pasado, en una nota publicada en EL UNIVERSAL, se asienta que habitantes de la colonia Jardines del Pedregal y de otras aledañas clausuraron simbólicamente las obras del complejo comercial y de oficinas en reclamo a las afectaciones por la obra.
Greta Gallman, vecina de la zona, aseguró entonces que las obras habían provocado severos problemas de tráfico, así como afectado casas y calles. También les preocupaba el abasto de agua.