Bélgica rinde homenaje a víctimas de ataque
• El grupo Estado Islámico reivindica el hecho; la fiscalía señala que privilegia la pista terrorista en los asesinatos
Bruselas.— Bélgica rindió homenaje ayer a las víctimas del ataque del martes en Lieja (este), entre ellas dos policías, mientras la investigación intenta determinar si el autor, un delincuente radicalizado, perpetró solo esta matanza reivindicada por el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
“El autor del ataque en la ciudad de Lieja, en Bélgica, es un soldado del Estado Islámico”, afirmó el grupo en un comunicado publicado por su órgano de propaganda Amaq. La versión no ha sido confirmada.
A las 13:00 horas locales, la ciudad de Lieja recordó a las víctimas —dos mujeres policía y un estudiante— con un minuto de silencio, encabezado por el primer ministro, Charles Michel, junto a decenas de policías y civiles con el rostro compungido y lágrimas en los ojos.
La fiscalía federal belga, que asumió el caso, anunció este miércoles que privilegian la pista terrorista. “Los hechos están calificados de asesinato terrorista”, según su portavoz, Wenke Roggen, quien confirmó que el asesino, identificado como Benjamin Herman, de nacionalidad belga y con antecedentes penales
por consumo de estupefacientes y robos, gritó en varias ocasiones “Alá es grande” y “estuvo en contacto con personas radicalizadas” en 2016 y principios de 2017.
“La radicalización puede ser una motivación, pero también puede ser la falta de perspectivas en nuestra sociedad, porque también cometió un asesinato la noche anterior [el lunes]”, dijo en la mañana el ministro del Interior, Jan Jambon, a la radio Bel-RTL. Añadió que quizá estuviera drogado al momento de cometer los crímenes.
Herman había salido el lunes de la prisión de Marche-en-Fammenne con un permiso que expiraba el martes por la tarde.
Medios belgas destacaron el papel de la rehén que el agresor tomó al entrar a una escuela. Se trata de una mujer musulmana que le espetó: “¡No debes estar aquí. Es una escuela!” y que según Jambon quizá evitó con su valentía que hubiera “más víctimas”.