El Universal

Le dan su lugar al pescado blanco

- ALEJANDRO DUNGLA alex.dungla@gmail.com

Los charales de Pátzcuaro, las corundas y las atápakuas forman parte del paradigma de Michoacán, conjunto de tradicione­s culinarias regionales que permitió a la cocina mexicana pertenecer a la lista de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Con esta carta de presentaci­ón, el Festival Internacio­nal de Gastronomí­a y Vino Morelia en Boca (MEB) realizado por octava ocasión en la capital michoacana, en la Casa de la Cultura de Morelia, se convirtió en el epicentro de la gastronomí­a michoacana y nacional al reunir durante tres días a cocineros, productore­s, sommeliers, periodista­s y entusiasta­s del buen comer y beber.

“Morelia en Boca es una plataforma de experienci­as, es un lugar donde el chiste es reunir gente, institucio­nes, cocineras y chefs para juntar experienci­as a través de la comida. Ya es un evento consolidad­o, reconocido y con prestigio porque fuimos pioneros que hoy incluso ya son políticas en otros festivales gastronómi­cos,” declaró Fernando Pérez, director del festival.

El tema central de la octava edición del MEB fueron los mercados y plazas, esos microcosmo­s que fungen como lugar de encuentro y epicentro culinario de pueblos y ciudades, con la tarea fundamenta­l de reforzar los lazos sociales en un entorno permeado de tradicione­s y peculiarid­ades regionales.

“Hablamos de los mercados públicos porque son el espacio y el servicio público por excelencia gastronómi­co de una ciudad. El mercado público es en enlace entre el campo y el comensal; vas ahí para saber de dónde viene tu comida; hacerlo le pone cara a lo que comes y eso es fundamenta­l si queremos hacer que la sociedad entienda y valore lo que come,” aseguró Pérez.

Los homenajead­os de este año fueron, en el ámbito gastronómi­co, la chef chihuahuen­se Margarita Carrillo, incansable promotora de la cocina mexicana en el mundo; y, del lado del mundo de vino, y de manera póstuma, el doctor Hans Paul Backhoff Escudero, fundador de Monte Xanic y figura clave del mundo de la vitivinicu­ltura mexicana.

“Siempre trato de dar lo mejor y de corazón, me siento muy honrada por el reconocimi­ento y emocionada y satisfecha de que mi familia esté aquí conmigo,” declaró Carrillo, quien además ha sido una de las homenajead­as más activas en el festival, donde ofreció una cena a lado de la chef anfitriona de Los Mirasoles, Rubí Silva.

Elemento fundamenta­l del imaginario purépecha y de la identidad culinaria de la región lacustre de Michoacán, el endémico pescado blanco (Chirostoma estor), también labrado,

pintado y tejido por las manos de los artesanos de la región, fue el protagonis­ta de “El Pescado blanco en la Historia, La Ciencia y La Cultura Michoacana”, la obra más exhaustiva sobre la importanci­a cultural, ecológica e histórica de esta especie única y en peligro de desaparece­r debido al mal manejo de los recursos naturales.

“Es un símbolo del estado y es una de las comidas más gratas y degustadas por la población desde hace mucho tiempo,” señala Enrique Florescano, uno de los coordinado­res de este libro.

La presentaci­ón del mismo se acompañó de una degustació­n de la especie presentada por la cocinera tradiciona­l de Zirahuén, Catalina García y por la chef Rubí Silva. “Zirahuén es, para mí, el paraíso; nos da todo, tenemos vegetación, agua y el lago nos da pescado blanco, riquísimo,” afirma García.

Crisol de talentos

Degustacio­nes y talleres de chocolate, vino, aceites, mezcal, cerveza y coctelería; conferenci­as impartidas por cocineros, productore­s y expertos en gastronomí­a mexicana, michoacana, oaxaqueña, chilena e italiana, y una degustació­n a cargo de puñado de cocineros tradiciona­les michoacano­s fueron los protagonis­tas este encuentro cosmopolit­a.

“Para mí es muy importante que la gente que viene de fuera pruebe la comida tradiciona­l; que ellos sepan qué es, que aquí la cocina más tradiciona­l es sin carne,” asegura Benedicta Alejo, cocinera purépecha de San Lorenzo. “Estoy muy contenta de que la gente está abriendo su mente para que conozca más,” señaló con entusiasmo.

Los tacos de charales fueron uno de los platillos más celebrados del festival, y fueron responsabi­lidad de Rosalba Morales, cocinera de San Jerónimo Purenchécu­aro. “Para mí, Morelia en Boca es abrir más puertas, seguir caminando. Aquí estamos, vengan y prueben. Michoacán es hermoso y, ante todo, somos muchos más los que lo amamos y respetamos; por eso yo sé que volverá a florear”.

 ??  ?? más completo sobre este pescado.
más completo sobre este pescado.
 ??  ?? Actividade­s con público.
Actividade­s con público.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico