Conviértete en un acumulador
Claves para entender los programas de millas y sumar puntos más rápido
Tener la oportunidad de volar en un asiento donde sí puedas estirar las piernas o conseguir boletos de avión sin tener que desembolsar un peso, parecen motivaciones suficientes para afiliarte a un programa de viajero frecuente. Pero considerando que éstos privilegios se basan en la acumulación de millas, alcanzar la cantidad necesaria para ser recompensado parece un logro muy lejano porque la mayoría de nosotros no puede viajar demasiadas veces al año.
Afortunadamente, tu frecuencia de vuelos no es el único factor que interesa para acumular puntos. Existen algunas claves para sacarles provecho con mayor facilidad a los programas de recompensas de las aerolíneas.
Cómo funcionan los puntos
1. Las variables. Aunque a veces su nombre lo indique, las “millas” no se refieren a la distancia exacta que recorres en un viaje, pues también se toman en cuenta variables como la clase en que viajas. Por ejemplo, el programa de Iberia trabaja con puntos llamados Avios: en todos los vuelos operados por la empresa, por cada milla de distancia hacia el destino elegido, obtienes hasta un Avio si vas en clase turista y 2.5 Avios por la categoría “business flexible”.
Algunas empresas, como LATAM, te dan más puntos con menos esfuerzo conforme avanzas en su programa de recompensas y adquieres una categoría de cliente más privilegiada.
2. Puedes migrar. Si ya tienes millas con una aerolínea, a veces pueden ser válidas con otra compañía que sea miembro de la misma alianza (red de aerolíneas), como Skyteam, que incluye Aeroméxico, Delta, Air France y KLM; One World, a la que están afiliadas American Airlines, LATAM, Iberia y British Airways; y Star Alliance, integrada por Air Canada, Avianca, Lufthansa y United, entre otras.
3. No es necesario volar. Muchas aerolíneas están asociadas con otros proveedores de servicio, de manera que, cuando haces todo tipo de compras, acumulas puntos para tus próximos viajes. Avianca trabaja con arrendadoras de autos y hoteles, mientras que Aeroméxico permite acumular con tiendas en línea y centros comerciales. También está la opción de adquirir una tarjeta de crédito con un banco asociado.
Entre los beneficios, puedes duplicar puntos obtenidos y ampliar tus alternativas de compras para sumar puntos.
4. No te emociones. Piensa bien en qué vas a usar tus puntos acumulados. De acuerdo con el sitio web Lifehacker, las aerolíneas solo destinan una parte de sus boletos para los viajeros frecuentes que buscan canjear sus puntos, por lo que las opciones de vuelo que encuentres (fechas y horarios) pueden ser limitadas, sobre todo si es temporada alta. Además, cuando adquieres un asiento de esta manera, los impuestos y tarifas extra corren por tu cuenta. Por eso a veces es mejor utilizar otro beneficio, como un ascenso de clase en tu próximo viaje.
5. Responde encuestas. Existen sitios web dedicados al marketing que tienen alianzas con los programas de recompensas de viaje. A veces el simple hecho de contestar una encuesta de satisfacción sobre un producto o servicio te ayuda a sumar puntos. Para el mercado mexicano, una opción es Opina y Acumula (www.opinayacumula.com.mx), que trabaja con Aeroméxico. Al registrarte y responder un cuestionario inicial, te dan 500 puntos.
6. No te limites. Los vuelos y upgrades no son los únicos beneficios. A veces las compañías ofrecen noches de hotel, viajes especiales, servicios prioritarios en el aeropuerto y acceso a salas de espera de lujo antes de tu vuelo. Algunas cuentan con plataformas de compra de artículos diversos, como electrónicos, que puedes pagar únicamente con puntos.
Si te falta poco para alcanzar la cantidad deseada de puntos con el fin de conseguir determinado beneficio, está la alternativa de comprarlos directamente con la aerolínea.