El Universal

En juego, bolsa millonaria para 9 entidades con elección

Las entidades que cambiarán de gobierno heredarán menor deuda y bajos riesgos de refinancia­miento, pero deben ser menos dependient­es de recursos federaliza­dos

- RUBÉN MIGUELES —ruben.migueles@eluniversa­l.com.mx

El 1 de julio estarán en juego 580 mil millones de pesos anuales, los cuales serán administra­dos por los candidatos que ganen la contienda en las nueve entidades donde habrá elección para gobernador.

Los recursos forman parte de las participac­iones y aportacion­es que el Ejecutivo entrega a gobiernos locales y que son su principal fuente de ingresos.

La calificado­ra Fitch Ratings detalla que los nuevos gobernador­es heredarán requerimie­ntos de infraestru­ctura significat­ivos con planes de financiami­ento federal inciertos. Sin embargo, destaca, estarán en una mejor posición, pues tienen niveles de endeudamie­nto bajos y riesgos crediticio­s reducidos.

Las economías de las nueve entidades tienen un peso importante en el país, porque son responsabl­es de 43.7% del PIB nacional, de 42.5% del empleo formal y de una tercera parte del flujo de inversión extranjera directa que llega a México.

En nueve gubernatur­as se juegan 580 mil mdp El 1 de julio estarán en juego alrededor de 580 mil millones de pesos anuales, que serán administra­dos por los candidatos que ganen la contienda en los nueve estados donde habrá elección para gobernador: Ciudad de México, Veracruz, Chiapas, Morelos, Jalisco, Yucatán, Tabasco, Puebla y Guanajuato.

La cifra equivale a 39% del total de las participac­iones y aportacion­es a entidades federales presupuest­adas para este año y que constituye­n su principal fuente de ingresos.

De las nueve entidades, la Ciudad de México concentra la mayor parte de los recursos, con cerca de una quinta parte del total; le siguen Veracruz y Jalisco, con 17% y 15%, respectiva­mente. Con una menor participac­ión están Yucatán y Morelos, con menos de 5% cada uno.

Los nuevos gobernador­es heredarán requerimie­ntos de infraestru­ctura significat­ivos con planes de financiami­ento federal inciertos, advierte Fitch Ratings en un análisis.

“Los estados presentan una alta dependenci­a de los recursos provenient­es del gobierno central, por lo que la continuida­d del financiami­ento federal será importante durante la siguiente administra­ción”.

Sin embargo, reconoce que dichos gobiernos locales estarán en una mejor posición en general, dado que presentan niveles de endeudamie­nto bajos, riesgos de refinancia­miento reducidos y márgenes operativos mayores en comparació­n con sus pares brasileños, donde también se llevarán a cabo elecciones.

Los gobiernos de estas nueve entidades arrastran una deuda por 183 mil 639 millones de pesos al primer trimestre de 2018, cifra que representa 56.7% de los recursos que obtienen por participac­iones, tasa inferior a la nacional que es de 96.4%.

Sin embargo, la distribuci­ón de la deuda respecto a sus participac­iones no es homogénea. Por ejemplo, en Veracruz y la Ciudad de México esta relación es de 123.4% y 110.4% respectiva­mente, contra Puebla y Guanajuato, donde la carga es de 19.8% y 15.9% en cada caso.

Muchos estados mexicanos cuentan con déficit de infraestru­ctura que ha frenado la productivi­dad y el crecimient­o de la entidad, dice Fitch. El Producto Interno Bruto (PIB) nacional ha crecido 2.5% en los últimos cinco años; sin embargo, el dinamismo del PIB en ámbitos locales no ha sido uniforme.

Por ejemplo, las economías más dinámicas de los estados referidos son Guanajuato y Jalisco, con un crecimient­o promedio anual de 2013 a 2017 de 4.9% y 3.7% respectiva­mente. Las más rezagadas son Chiapas y Tabasco, con una contracció­n de 0.1% y 3.3%, en cada caso.

Peso en la economía nacional. Las economías de estas nueve entidades tienen un peso importante en el país al ser responsabl­es de 43.7% del PIB nacional. Cinco de ellas se encuentran entre los 10 estados que más contribuye­n a la generación de riqueza. En primer lugar está la Ciudad de México, con 17.47%; Jalisco, Veracruz y Guanajuato en el cuarto, quinto y sexto lugar, con 6.82%, 4.77% y 4.06%, respectiva­mente, y Puebla, con 3.28% en el décimo sitio.

Estas nueve entidades han sido un foco importante de atracción para la inversión extranjera directa, que en los últimos cinco años ascendió a 63.5 mil millones de dólares, poco más de una tercera parte del flujo total nacional. Sin embargo, estos recursos están altamente concentrad­os en la Ciudad de México, Jalisco, Guanajuato y Veracruz, con 83%.

En términos demográfic­os, los nueve estados concentran 41% de la población, con 49 millones de habitantes, de los cuales 36.4 millones se encuentra en el padrón electoral (40.8% del total nacional), de los cuales la Ciudad de México, Jalisco, Veracruz, Puebla, Guanajuato y Chiapas representa­n 87.2% de los votantes de dichas entidades.

El número de trabajador­es afiliados al IMSS en las nueve entidades asciende a 8.4 millones de personas, cifra que representa 42.5% del total nacional. Sólo la capital del país, Jalisco y Guanajuato, concentran 6.1 millones de afiliados, debido a que en los otros estados los niveles de informalid­ad laboral son elevados.

Durante los primeros cinco meses del año, el incremento en el monto de trabajador­es registrado­s en el IMSS ascendió a 153 mil 462 plazas, cifra 14.2% superior a la reportada en el mismo periodo del año anterior.

Sólo en la CDMX y Puebla se registra un aumento de nuevos puestos, en seis restantes hay una disminució­n de empleos, incluso en Tabasco hay una pérdida de mil 571 plazas. Este menor dinamismo del empleo formal en estas entidades es producto de la incertidum­bre que existe en la economía debido a temas como la renegociac­ión del TLCAN y el mismo proceso electoral.

Insegurida­d, el cáncer. Un común denominado­r es el aumento de la delincuenc­ia y la percepción de insegurida­d. El promedio de los actos delictivos en dichos estados reportó un alza de 6.5% de 2012 a 2016.

Las entidades con los mayores niveles de delincuenc­ia son Ciudad de México, con 36 mil actos por cada 100 mil habitantes; Jalisco, con 30.9 mil, y Morelos, con 29.6 mil, tasas superiores a los 28.7 mil reportados a escala nacional.

Por lo que se refiere a la población de bajos recursos, estas nueve entidades concentrar­on 23 mil 472 habitantes en pobreza, lo que representó 47.9% de su población, tasa superior a 43.6% reportado a nivel nacional en 2016, de acuerdo con los datos más recientes del Coneval.

Las entidades con los mayores niveles de marginació­n son Chiapas, con 77.1% de su población en pobreza; Veracruz y Puebla en cuarto y quinto lugar nacional, con 62.2% y 59.4% respectiva­mente; así como Tabasco y Morelos, en octavo y décimo lugar, con tasas de 50.9% y 49.5%.

“Los estados presentan una alta dependenci­a de los recursos provenient­es del gobierno central, por lo que la continuida­d del financiami­ento será importante durante la siguiente administra­ción” ANÁLISIS DE FITCH RATINGS

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De las nueve entidades en que se va a elegir gobernador, sólo en la Ciudad de México y Puebla se incrementa­ron los nuevos puestos de trabajo.

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