Canal 22 celebra a sus trabajadores
Se reconoció la labor de quienes no aparecen en pantalla pero que colaboran para hacer los programas
Un mes, cinco años, 10 y algunos hasta 25 es el tiempo que decenas de trabajadores llevan construyendo a Canal 22, y que fueron reconocidos el pasado viernes en los estudios Churubusco con brindis y aplausos.
Durante el festejo se transmitieron algunos videos de los empleados, quienes llegan temprano al lugar para hacer posible la magia de la televisión y que no son precisamente los que aparecen en pantalla: maquillistas, vestuaristas, camarógrafos, floor manager, editores, trabajadores de limpieza, y otros que llenan a diario los pasillos del lugar.
Una mujer compartió que fue trabajando allí como encontró al amor de su vida.
Pepe Gordon, por otro lado, confesó que su platillo favorito es una torta con chipotle.
En el evento estuvieron presentes su director, Pedro Cota, y un representante de la secretaria de Cultura, María Cristina Cepeda.
“Se dice fácil y rápido pero ustedes mejor que yo saben lo que implica construir día a día el Canal Cultural de México, un canal de prestigio. A principios de los 90 un selecto grupo de intelectuales, representantes de la sociedad civil, de la comunidad cultural y académica, así como instituciones de educación superior, solicitaron al entonces presidente de la República utilizar la concesión del Canal 22 para convertirlo en un canal no comercial de interés público y de contenido cultural”.
Recordó también que José María Pérez Gay, director fundador, dijo en algún momento que dudó en tomar esta responsabilidad por su desconocimiento en la parte de televi- sión, pero su trabajo lo llevó a ser acreedor del Premio Cámara de la Unesco.
La entrevista con la que el canal dio banderazo de salida fue una realizada por Silvia Lemus en Cartagena de Indias a Gabriel García Márquez.
Pedro habló de todos los programas que conforman el alma del 22: Música Maestro, con Armando Manzanero, Escenarios, Noticieros, Semanario 22, La raíz doble, Pantalla de cristal, La dichosa palabra y La oveja eléctrica.