Rompen invicto felino en casa
Al ser superado por Toluca, Tigres recuerda lo que es perder de local
Monterrey.— Entre sudor y sangre, los Tigres dieron sus primeros tumbos del torneo y arruinaron una larga racha de no perder en el estadio Universitario, luego de ser remontados por el Toluca (1-2), en un partido donde la hostilidad comprometió la labor arbitral de Roberto García Orozco.
Con su segundo triunfo, los Diablos Rojos alcanzaron siete puntos, mientras que los felinos marchan con seis, luego de su segundo descalabro al hilo.
La localía se adelantó en la pizarra gracias a la joya francesa, el delantero André-Pierre Gignac, a los 14 minutos. Sin embargo, el Universitario pasó a ser un infierno para los anfitriones, con las anotaciones de Enrique Triverio y del brasileño Wiliam da Silva, para el 2-1, un marcador que habría sido diferente si las tarjetas del silbante hubieran medido con el mismo rigor. A los 16’, perdonó a Triverio un codazo sobre Jorge Torres Nilo, quien salió por unos minutos con sangre en el rostro y en la vestimenta.
A la desconcentración regiomontana se sumaron las expulsiones de Guido Pizarro (22’) y de Javier Aquino (69’).
“No me quiero meter más con los árbitros porque la he pagado muy caro”, opinó Hernán Cristante, entrenador del Toluca que reapareció tras una suspensión de la Disciplinaria.
Tigres rompió una cadena de 29 partidos sin derrotas como locales; no perdían desde la fecha 12 del Clausura 2017.
“Con la expulsión [de Guido Pizarro] se nos vino abajo el partido” RICARDO FERRETTI Entrenador de Tigres