Concurso Género y Justicia
La semana pasada tuvo lugar la premiación del Concurso “Género y Justicia” 2017, al que por novena ocasión convoca la SCJN en unión con la Oficina en México del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, ONU-Mujeres y las asociaciones civiles Periodistas de a Pie y Mujeres en el Cine y la Televisión.
La situación de desigualdad que padece la mujer encuentra su raíz más profunda en una cultura que por milenios la ha relegado; de ahí la importancia de proyectos como éste que motivan a profundizar sobre las distintas vertientes de esta problemática y, muy importante, hacerla visible para promover su erradicación.
El concurso es una iniciativa que surge en 2009 con el objetivo de incentivar la investigación en temas relacionados con género, impartición de justicia y derechos humanos y, al propio tiempo, propiciar una mayor sensibilización en la sociedad sobre la realidad que vive la mitad de la población de nuestro país.
La convocatoria al concurso se dirige al público en general y pueden participar personas mexicanas o extranjeras. Consta de tres categorías: ensayo, documental y reportaje escrito y los premios se entregan a los tres primeros lugares en cada una.
En esta ocasión se recibieron un total de 66 trabajos en las distintas categorías: 29 ensayos, 30 reportajes escritos y 7 documentales, provenientes de 18 estados de la República y uno enviado desde Bélgica, lo que demuestra que esta iniciativa trasciende nuestras fronteras y despierta el interés de participantes en otros países.
Los acreedores al primer premio fueron: en la categoría de ensayo, Juan Jesús Góngora Maas, con el tema Hacer visible lo invisible: la violencia contra la mujer adulta mayor y la obligación de prevención; Carmen Eliana García González, con el documental Niñas y adolescentes migrantes en la frontera sur de México: historias invisibles de violencia y, con el reportaje escrito Maternidad en las calles: mujeres luchan para evitar que las autoridades les quiten sus hijos, Eréndira Aquino Ayala.
A nombre de los galardonados, Valeria Durán, quien obtuvo el 2º lugar con el reportaje escrito Las muertas que no se ven: el limbo de los feminicidios¸ agradeció el reconocimiento otorgado con elocuentes palabras.
Los representantes de las instituciones convocantes, Jan Jarab por el Alto Comisionado de NU; Belén Sánz, por ONU-Mujeres, y Concepción Taboada de la asociación Mujeres en el Cine y la TV; así como el ministro Luis María Aguilar Morales, presidente de la SCJN y del CJF, quien presidió la ceremonia, coincidieron en resaltar que los trabajos presentados constituyen un herramienta para evidenciar la realidad que enfrentan algunos de los sectores más vulnerables del país y en muchos casos abonan a la reflexión y a la búsqueda de una solución, además de que contribuyen a crear una mayor conciencia sobre la discriminación y la violencia que sufren las mujeres por razón de género.
Nuestra gratitud a los jurados del certamen. Todas y todos expertos en la materia, que con absoluta libertad y el prestigio que les precede, dictaminaron los trabajos:
En la categoría de ensayo, la doctora Ángela Quiroga, comisionada nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres; maestra Ana Pecova, directora de EQUIS: Justicia para las Mujeres; licenciada Enriqueta Cabrera, periodista y escritora, y doctora Lucía Núñez, investigadora del CIEG-UNAM.
A la psicóloga y conductora Tere Vale y al comunicólogo y analista político Leonardo Curzio, así como a las cineastas María del Carmen de Lara y Ana Cruz, en la categoría de documental.
Finalmente, en la categoría de reportajeescrito, ala investigador aEdith López Hernández; Luis Guillermo Hernández, periodista independiente, y maestra. Regina Tamés Noriega, directora del Grupo de Información en Reproducción Elegida GIRE.
Nuestro reconocimiento y felicitación a los participantes. Es alentador encontrar en los trabajos una genuina preocupación entre nuestros jóvenes por problemas actuales, reales, vigentes en nuestra sociedad.
Con ello, vemos cumplida la misión que la Corte y co-convocantes nos impusimos al organizar el concurso.
Aunque falta mucho camino por recorrer hasta alcanzar la plena igualdad de la mujer y erradicar la discriminación y violencia que lastiman en lo más profundo su dignidad, este concurso constituye un paso que aspira a contribuir a un cambio cultural.