UN DUELO DE MUCHA GARRA
Los Pumas y los Tigres regalan un vibrante juego en Ciudad Universitaria, donde destaca el guaraní Carlos González, quien hace el triplete que mantiene a los locales entre los cuatro primeros de la clasificación.
En un partido de volteretas, Pumas y Tigres empatan a tres; el paraguayo Carlos González realiza hat-trick.
El clima frío y lluvioso de la tarde de domingo, inusual en el estadio Olímpico Universitario, contrastó con el caliente empate 3-3 entre Pumas y Tigres.
Por un lado, todo el potencial ofensivo del equipo regiomontano. Por el otro, una actuación inspirada del delantero Carlos González. Dos equipos que se podrían enfrentar en la Liguilla.
La igualada permitió que los Pumas se mantuvieran entre los mejores cuatro del torneo. Los Tigres no se movieron del séptimo sitio, por encima del Querétaro.
El marcador se abrió apenas al minuto 7 en favor de los de casa. La anotación llegó luego de un pase filtrado a Felipe Mora, quien disparó ante la salida de Nahuel Guzmán, el balón salió rebotado y le quedó a merced para que González fusilara el marco de los regiomontanos.
El paraguayo salvó en un par de ocasiones, cuando los auriazules se fueron abajo en los cartones.
Un golazo desde fuera del área de Eduardo Vargas silenció el inmueble en el Pedregal. Al 23’, el chileno sacó un bombazo que dejó sin posibilidades el lance de Alfredo Saldívar.
El tanto del andino despertó el poderío de la visita. Con este nuevo ímpetu cayó el segundo. Rafael Durán, quien apareció por primera vez como titular en el Apertura 2018, quedó solo en el área gracias a un gran pase de Javier Aquino y no le temblaron las piernas para vencer al arquero capitalino.
La apuesta por el juvenil mexicano del técnico Ricardo Ferretti funcionó, en parte por la regla 20/11, en la que son de los pocos equipos que todavía no cumplen los minutos de los menores.
Antes del descanso, la figura apareció para igualar el duelo. El paraguayo agarró de volea el balón y firmó el empate.
Para la segunda mitad, André Pierre-Gignac no se quiso quedar fuera del festín goleador. En uno de los tantos desbordes de Aquino, el volante le puso medio gol al francés, quien remató con frialdad para retomar la ventaja.
David Patiño no tardó en meter a Matías Alustiza para ser más ofensivo. Y al 62’, Carlitos González marcó su hat-trick con un cabezazo poderoso, otra vez a pase de Barrera.
Así, el ex delantero del Necaxa consumó su mejor actuación con los auriazules. Pero, no quedó todo en eso. La lluvia acrecentó y el juego se convirtió en un vaivén.
Y si bien, la paridad dejó el sinsabor a los equipos, la afición disfrutó de un partido de mucho goles, en el que ni la lluvia, el frío o el cambio de horario del partido apagó el espectáculo.
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