Paseo por Innsbruck
Dos veces sede de los Juegos Olímpicos de Invierno, Innsbruck, capital de la región austriaca del Tirol, combina una moderna atmósfera y el estilo de vida de los Alpes.
En el casco antiguo, de hace más de 500 años, descubres un pasado ligado a los Habsburgo. En el Tejado de Oro y su museo conocerás más sobre el emperador Maximiliano.
Desde mediados de noviembre y hasta principios de enero, permanecen en esta área mercados navideños que dan al ambiente un aire acogedor.
No puedes dejar de ir al soberbio Palacio Imperial, uno de los tres monumentos más importantes de Austria; a la Catedral de Santiago; la Iglesia de la Corte; al Museo de Arte Popular del Tirol, un pintoresco recorrido por las tradiciones locales; la Torre de la Ciudad para tomar las mejores fotos panorámicas; y, hacia las afueras, el impresionante castillo renacentista de Ambras.
Aprovecha una mañana y sube al moderno funicular de Hungerburgbahn. En pocos minutos llegarás al zoológico alpino y, desde ahí, sigue el ascenso hacia Seegrube y Hafekelar, para entrar de lleno a la emoción de la nieve.
Otra opción es el moderno trampolín de saltos diseñado por Zaha Hadid y el Tirol Panorama, que alberga la obra de arte más grande de la región y que escenifica la lucha entre tiroleses y las tropas napoleónicas en el siglo XIX.
Reserva un espacio por la tarde para ir de compras a la calle Maria-Theresien-Strasse, a los grandes almacenes Kaufhaus Tyrol, a las galerías Rathaus-Galerien, o a las tiendas del casco antiguo.
Tienes que ir al Mundo de Cristal de Swarovski, a 15 kilómetros de Innsbruck. Es una experiencia mágica a través de cámaras diseñadas por artistas de todo el mundo: la de “El Sol” pertenece al arquitecto mexicano Fernando Romero.
Toma en cuenta las ventajas de Innsbruck Card, a precios razonables y válida para 24, 48 o 72 horas. Obtendrás descuentos, acceso a actividades gratuitas, museos y atractivos como el Swarovski Kristallwelten; viaje de ida y vuelta en los funiculares y uso libre de la red de transporte público.