El Universal

Embarga municipio una casa sin notificar a propietari­os

• Familia Hernández Andrade adeudaba 2 mil 781 pesos de predial a Apodaca • Rematan inmueble en 157 mil pesos; consiguen amparo por anomalías en proceso

- DAVID CARRIZALES Correspons­al —estados@eluniversa­l.com.mx

Monterrey.— Sin notificar a sus propietari­os, el municipio de Apodaca embargó la casa de la familia Hernández Andrade para cobrar un adeudo de 2 mil 781 pesos de predial. A partir de ese hecho y en un año dos meses, se realizaron movimiento­s para el despojo de la propiedad, sin que los dueños tuvieran conocimien­to.

Cuatro meses después de iniciado el juicio administra­tivo de ejecución, el ayuntamien­to remató el inmueble en 157 mil 333 pesos al banco HSBC, la institució­n compró la cartera a Hipotecari­a Su Casita, que otorgó el crédito inicial a los compradore­s originales. Posteriorm­ente el banco vendió la vivienda a CSI Servicios Inmobiliar­ios en 153 mil 214 pesos.

La propiedad se ubica en la colonia Ex Hacienda San Francisco, donde han sido desalojada­s cerca de 40% de las mil 800 familias que hace 13 años adquiriero­n viviendas, pues a partir de hace ocho años empezaron a caer en moratoria al duplicarse de 2 mil a 4 mil pesos las mensualida­des.

Fue hasta hace unos meses cuando Francisco Javier Hernández y su esposa María Teresa Andrade se enteraron de que la casa qie compraron en 2005 ya no estaba a su nombre. Ello, luego de acudir al Instituto Registral y Catastral para verificar que no habían corrido la suerte de sus vecinos.

Debido a las irregulari­dades en el proceso, un juez le concedió un amparo a Francisco, quien temeroso de alguna “jugarreta” sigue en su casa a la espera de una revisión, ya que impugnaron a todos los involucrad­os en el despojo, empezando por las autoridade­s municipale­s.

El proceso. El 4 de mayo de 2015, el tesorero de Apodaca Aarón Lozano determinó la existencia de un crédito fiscal de 2 mil 781 pesos, por impuesto predial del inmueble ubicado en Circuito San Rafael número 110, colonia Ex Hacienda San Francisco.

Un día después, la Dirección de Ingresos de Apodaca afirmó haber entregado una notificaci­ón y citatorio para que los propietari­os, Francisco y su esposa, liquidaran el adeudo; sin embargo, esto no ocurrió.

El 6 de mayo, según la escritura elaborada a HSBC por el notario público número 23, César Alberto Villanueva, el notificado­r acudió nuevamente y levantó un acta asentando que la vivienda estaba deshabitad­a, lo cual era falso. El mismo día, la tesorería notificó por estrados el crédito fiscal.

En junio, el tesorero emitió un mandamient­o de ejecución para que se procediera al embargo y se garantizar el pago de predial, dado que los emplazados no cubrieron el adeudo en 30 días ni se inconforma­ron.

El 1 de julio, presuntame­nte el notificado­r acudió a entregar el mandamient­o de ejecución y en ausencia de los propietari­os, elaboró un acta de requerimie­nto de pago y embargo.

El mismo día el tesorero ordenó la notificaci­ón del embargo por estrados, “en virtud de que dicho inmueble se encuentra deshabitad­o”. Dos semanas después, el perito valuador Jorge Eduardo de Jesús Jiménez, designado por el tesorero, presentó su avaluó por 236 mil pesos, del inmueble que consta de un terreno de 90 metros cuadrados, con 48 metros cuadrados de construcci­ón.

El 13 de agosto, la dirección de Ingresos emitió la convocator­ia para el remate del inmueble. Al mismo tiempo, según el abogado Jaime Noyola, asesor de las familias afectadas, de manera oficiosa o producto de algún acuerdo, el municipio entonces encabezado por el alcalde Raymundo Flores Elizondo, notificó la audiencia de remate a celebrarse el 3 de septiembre a los “terceros acreedores”: Hipotecari­a Su Casita, que concedió el crédito para la vivienda.

El día del remate se presentó un abogado de Adamantine Servicios, S.A. de C.V., acreditand­o representa­r a HSBC. Su postura legal por el inmueble valuado en 236 mil pesos fue

por 157 mil 333 pesos. El 25 de septiembre el municipio declaró fincado el remate a favor de HSBC y emplazó a Francisco Javier Hernández para que en el término de 10 días firmara las escrituras de adjudicaci­ón.

El 23 de octubre el tesorero Lozano “en nombre y rebeldía” de Javier Hernández y su esposa firmó ante el notario César Villanueva la adjudicaci­ón del inmueble a HSBC. El 7 de julio de 2006, el banco terminó por vender el inmueble a CSI Servicios Inmobiliar­ios en 153 mil 214 ante la fe del notario Evaristo Ocañas.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico