A BORDO, ¿QUÉ TIPO DE ACTIVIDADES BUSCAS?
Si eres muy activo y tu plan es pasar el tiempo a bordo del barco, un crucero comercial es perfecto para ti. Año con año, las principales navieras compiten por superar las actividades de sus rivales: disponen de toboganes, tirolesas, deportes extremos, entretenimiento con realidad virtual y hasta pistas de go karts. Entre fiestas temáticas, talleres y obras musicales, no hay manera de aburrirte, lo cual es ideal para familias con niños y adolescentes. Viajar con una compañía premium es más adecuado si vas en pareja o quieres permanecer relajado, aunque se incluyen actividades para niños. Las clases de arte, maridajes o los performances relacionados con el destino que visitas son sus mayores atractivos. También presentan musicales y disponen de spa (con costo adicional). Los cruceros fluviales son muy parecidos a los premium en cuanto a su oferta de actividades, con la excepción de que no hay teatro.
Los cruceros de lujo no son muy convenientes para familias, pues el entretenimiento no va dirigido a los niños. Estas navieras invierten mayor esfuerzo en las experiencias de spa, con tratamientos intensivos y médicos. Todas éstas tienen costo extra.
Si navegas en un barco de expedición, lo más importante es el destino. Sylvia St. Lawrence, directora de ventas de Silversea para Latinoamérica, nos contó que, todos los días, después de las excursiones, los especialistas en el destino te explican sobre los sitios que acabas de visitar, su flora y fauna. Resuelven todas tus dudas y te dan un conocimiento más profundo del destino en cuestión.