Perfección de punta a punta
Estados Unidos vence a Holanda y gana su cuarta Copa del Mundo, segunda al hilo
Lyon.— La selección femenina de Estados Unidos ratificó toda la calidad que sus futbolistas prometieron... Tal vez, se superaron.
Especialmente Megan Rapinoe, la capitana con el cabello rosado que acabó llevándose el Balón de Oro a la mejor jugadora del Mundial y la condición de defensora de la igualdad.
Estados Unidos conquistó su cuarta Copa Mundial —un hito para el futbol femenino— y segundo de manera consecutiva, tras vencer a Holanda (2-0), en un partido en que Rapinoe convirtió un penalti en la segunda mitad, para abrir el marcador, y Rose Lavelle aportó el segundo gol.
Rapinoe, quien atrajo la atención del mundo dentro y fuera de la cancha, marcó a los 61 minutos, luego de que el videoarbitraje determinó que Stefanie van der Gragt había cometido falta sobre Alex Morgan, con una patada al hombro, en el área penal.
Dos días después de su cumpleaños 34, Megan batió a la arquera Sari van Veenendaal para su gol 50 a nivel internacional y su sexto del torneo, para ganar la Bota de Oro como máxima anotadora de la competencia. Tras convertirse en la jugadora de mayor edad que marca en una final de la Copa del Mundo, adoptó una pose victoriosa, con los brazos extendidos.
“Es irreal. No puedo describir cómo me siento ahora mismo. Es absurdo”, dijo Rapinoe. “Estamos eufóricas y eso es lo que nos hace tan especiales. No bajamos los brazos. Somos muy unidas y haremos lo que sea para ganar”.
Lavelle, la prometedora estrella del equipo a sus 24 años de edad, añadió un gol —con un disparo de zurda— a los 69 minutos, tras escaparse en solitario por el centro.
Los aficionados, muchos vestidos en rojo, blanco y azul, corearon “¡Pago equitativo!” tras el silbatazo final. Un recordatorio de la demanda que las jugadoras presentaron en marzo a la Federación Estadounidense de Futbol, acusando discriminación de género.
Rapinoe atrajo la ira del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, durante el torneo, al decir que ella y sus compañeras rechazarían visitar la Casa Blanca; parte de la amplia presión del equipo en busca de la igualdad de género.
Las bicampeonas nunca fueron perdiendo en el torneo. •