Vive un choque de culturas Bereber/ Marruecos
Siete etnias alrededor del mundo te muestran en persona su visión del mundo y costumbres. Algunas están en riesgo y en el turismo encuentran su esperanza, mientras otras se adaptan a las tierras más inhóspitas
Dónde viven. Aunque habitan en otros seis países, Argelia y Marruecos cuentan con la mayor población bereber, y el segundo ofrece una industria turística mejor desarrollada. En Marruecos, la etnia se extiende por la cordillera del Atlas, la cual abarca parte del Sahara, así como la región del Rif.
Su cultura. Se calcula que la etnia apareció hace unos cuatro mil años, al norte de África. Ellos prefieren el nombre “amazigh”, que significa “gente libre”, pero los árabes les llamaron bereber, una derivación de “bárbaro”, como se le conocía en la antigüedad a quien no hablara griego o latín. Por influencia árabe también se adoptó el islam como religión. No obstante, hay algunas creencias que perduran hoy en día. Muchos artesanos buscan transmitirle “baraka” (un poder espiritual) a sus textiles. Se dice que tal cualidad aleja a las malas energías, y se obtiene a través de ciertos símbolos o tonalidades en los diseños. La costumbre dicta que las mujeres lleven tatuajes en la cara para representar el paso de la adolescencia a la adultez. Como el islam lo prohíbe, utilizan henna. Es fácil identificar un pueblo tradicional bereber: sus casitas de adobe, con tonalidades rojizas, parecen camuflarse en los paisajes desérticos de Marruecos. En un solo hogar pueden convivir varias generaciones que siguen un régimen patriarcal.
La experiencia. Visitar la cordillera del Atlas requiere un traslado de dos horas desde Marrakech. Por lo tanto, es sencillo organizar un viaje de uno o varios días por la región natural. Atlas Sahara Tours (www.atlasandsaharatours.com) es una de las empresas que hacen itinerarios. Enclavado en las montañas se encuentra el hotel Kasbah du Toubkal (kasbahdutoubkal.com), operado por miembros de la comunidad bereber. Hacen talleres inspirados en el arte local, visitas a casas familiares en los pueblos indígenas y tours en camello por el Sahara con fogatas y representación de danzas por los bereber.