MODELO Y PARACAIDISTA
Kristal dice que no ve su condición como un obstáculo, sino al contrario. Celebra sus éxitos de una forma especial: saltando en paracaídas
A Kristal nada le impide hacer lo que le apasiona: ayudar a los demás, estar en una pasarela y practicar deportes extremos.
“No [se trata de] únicamente poner rampas, necesitamos un canal masivo para entender la discapacidad” ROBERTO REMES Creador del proyecto Rey Peatón
Kristal Peña Miranda nació con un tipo de parálisis cerebral. Debido a esto, ella no puede mantener el peso de su cabeza ni de su columna, tampoco controla completamente el lado izquierdo de su cuerpo. Sin embargo, aprovecha la movilidad que tiene para hacer lo que más le apasiona: ayudar a los demás, saltar en paracaídas y modelar.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Kristal platica sobre su discapacidad y la manera en que la integra a su vida sin verla como un obstáculo. Aun cuando está en silla de ruedas, siempre busca aprender e intentar cosas nuevas, como nadar y montar a caballo.
Después de tomar terapia cuatro años y medio en el Centro de Rehabilitación e Inclusión Infantil Teletón (CRIT) de Puebla, comenzó a aceptarse y sentirse más cómoda con ella misma, porque antes era tímida y pasaba mucho tiempo de mal humor.
Se da tiempo para participar en causas sociales, como apoyar a niños marginados y trabajar por la inclusión de personas con discapacidad. También se dedica a reunir información sobre perros perdidos en redes sociales para que sus dueños los encuentren fácilmente.
#ORGULLO MEXICANO
La ayuda y el amor de sus padres, que siempre la han incluido y tratado como a sus otros dos hermanos, le permite sentirse confiada para desarrollarse en la sociedad: “Mi familia es mi mayor pilar y motivación para hacer las cosas, y el equipo que me echa porras”.
Un parteaguas en su vida fue cuando conoció a Gloria Mejía, locutora del programa Sin barreras, a través de la estación Puebla FM, la cual transmite información dirigida a personas con discapacidad y los invita a participar. Ahí, Kristal fue colaboradora cuando tenía 15 años, motivo que la impulsó a querer estudiar Comunicación.
Todos los viernes, de 11:00 horas al mediodía, la joven estaba frente al micrófono y cuando no iba Gloria, ella abría el turno, lo cual recuerda con mucha alegría, porque se trata del medio de comunicación que más le gusta y en el que más cómoda se siente.
Kristal ha sorprendido a familiares y amigos con su particular manera de festejar cada éxito que tiene: aventándose en paracaídas. Para ella, es una costumbre celebrar los buenos momentos con una dosis de adrenalina.
Interés por ayudar
Desde pequeña, Kristal pedía a su familia que la llevara a repartir comida y juguetes a niños en situación de calle, esto a raíz de que comenzó a cuestionarse: “¿Por qué ellos no juegan y yo sí?, ¿por qué no tienen casa y yo sí”.
De esa inquietud surgió el proyecto Corazón de Kristal, que inició en 2018 para ayudar a los niños en condiciones marginales. Esto empezó a cobrar forma en la universidad, cuando un asesor notó su interés por el tema y vio la trascendencia de la desarrollada investigación que ella ya tenía al respecto.
El profesor le dijo: “Veo tu proyecto y sí está muy bueno, pero siento que tú das para más. Se me ocurre que puede dejar huella y si en algún momento no lo puedes continuar, alguien lo retomará”. Por eso le recomendó tomar ese trabajo para titularse de la licenciatura en Comunicación, en la Universidad Anáhuac.
Después comenzó a trabajar por la inclusión de personas con discapacidad. “Voy a contribuir un poco a la sociedad con mi granito de arena, todos somos iguales, cada persona puede hacer lo que quiera siempre y cuando tenga chance de demostrar sus habilidades y capacidades”, dice.
Se reconoce como “una persona que no puede estarse quieta”, por eso siempre piensa qué proyecto puede poner en marcha o en cuál puede participar: “Estoy en varias fundaciones, porque lo que me mueve es hacer acción social, generar cualquier proyecto que tenga que ver con la inclusión y cambiar paradigmas”.
A pesar de haber sido dada de alta del CRIT sigue colaborando como voluntaria en el proyecto Enruédate, el cual se enfoca en dar pláticas en escuelas, empresas y talleres para la inclusión.
Además de ese proyecto, también forma parte de las fundaciones Contagia Alegría, encargada de llevar payasos a pacientes en hospitales para amenizarles su estancia, Huella Colectiva, en la que difunde información cultural, social, política y ambiental, y Reskate Kan, la cual reúne información sobre perros perdidos y encontrados.
México inclusivo
“Me he enfrentado a barreras arquitectónicas”, indica Kristal, debido a que en su universidad y en otros lugares no hay rampas para personas en silla de ruedas: “Estudié tres años en la Universidad Anáhuac, Puebla, pero les falta mucho en materia de inclusión, y decidí terminar mi último año de la carrera en la Ciudad de México”.
Respecto al tema, Roberto Remes, creador de la iniciativa Rey peatón, señala al EL UNIVERSAL: “Necesitamos algún canal masivo para que entendamos la discapacidad, no es sólo poner rampas. En algunos casos, las pendientes de las mismas son inadecuadas para que la persona con silla de ruedas ande con absoluta libertad”.
También profundiza en que hay que seguir trabajando para hacer más fácil el cruce de avenidas y de calles. Es evidente, agrega, que en materia de movilidad para personas con discapacidad el país va lento.
Comenta que en el gobierno existe el Instituto de las Personas con Discapacidad de la Ciudad de México (Indiscapacidad CDMX), que trabaja para garantizar la participación activa de los miembros de ese sector en todos los ámbitos. El instituto laboraba de cerca con la ahora extinta Autoridad del Espacio Público (AEP).
Roberto Remes Rey Peatón fungió como último titular de la AEP. Asegura que tenían un proyecto para hacer de la Ciudad de México un espacio inclusivo: antes de terminar una obra hacían recorridos para perfeccionarla.
“Llegamos a hacer algunos recorridos con personas con discapacidad, ya sea en sillas de ruedas o débiles visuales, que nos iban orientando el problema que veían de la obra”, detalla.
También apunta que falta mucho para lograr que todas las personas tengan accesibilidad universal en toda la ciudad, es decir, que cualquier objeto o lugar esté al alcance sin importar si tiene o no una discapacidad. Remes apuesta por invertir en lo micro: en los peatones antes de lo macro.
“Los retos que debería empezar a poner la ciudad cada vez que invirtamos en lo macro es que utilicemos un porcentaje en lo micro”, dice.
El Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (Copred) señala que aún prevalecen dificultades para que las personas con discapacidad puedan ejercer con plenitud sus derechos, en buen medida por obstáculos sociales y culturales.
Nuevos horizontes
“La gente tiene un estereotipo de modelo casi con medidas 90-60-90 y de repente llegas tú, como licenciada en Comunicación y la gente cercana dice: ‘Ni lo intentes, no te van a dar trabajo porque estás en silla’. Yo soy de la idea de que nada pierdes con intentarlo”, menciona la joven.
En ocasiones al verse al espejo no se percibe bonita, por eso, indica, continuamente trabaja en la autoaceptación y el amor propio. Lejos de deprimirse, Kristal busca soluciones, una de las maneras en la que ella considera que puede hacerlo es cambiar la filosofía de la sociedad respecto a etiquetas y estereotipos. Le gusta platicar con la gente para conocer diversos puntos de vista y aprender cada día más.
Aunque en la mayoría de programas de radio y televisión es poco común ver a personas con discapacidad dirigiéndolos o participando, existen las iniciativas y el talento. Kristal confía en ello, sobre todo ahora que busca incorporarse al mundo laboral.
“Quisiera estudiar otra carrera, pero estoy en busca de trabajo que tenga que ver con mis estudios”, agrega.
Según el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), la asistencia a la escuela es casi universal en los niveles básicos (97%); entre las personas con discapacidad el porcentaje cae a 80%. Conforme pasa el tiempo, sólo 28% de este sector se incorpora a la educación media superior y superior. Además, 25% de las personas con discapacidad con una ocupación económica tiene contrato.
Su primer desfile de modas
Recientemente Kristal fue parte del All Inclusive Runway, el primer desfile de modas inclusivo en México, organizado por la asociación Cambiando Modelos y Kadima. En este evento participaron personas con y sin discapacidad luciendo los atuendos de Isabella Springmühl, la primera diseñadora con Síndrome de Down, y de la mexicana Lydia Lavín.
El desfile se llevó a cabo el 26 de septiembre en la Fuente de Xochipilli, en el Bosque de Chapultepec. Fue un festejo a la diversidad, a la integración y respeto de todas las personas. All Inclusive Runway marcó una pauta en México de lo que en el futuro debe ser algo común en todas las pasarelas.
Silke Lubzik, directora y fundadora de Cambiando Modelos, señala: “Hay que dejar de ver la enfermedad para empezar a observar a las personas”, a fin de tratarlas con normalidad. Menciona que se ha pedido de todas las formas posibles que se preste atención a las personas con discapacidad, pero no hacen caso, por eso apuesta por otra manera de hacer notar que hay mucho talento que se ha dejado de lado.
Enfatiza que la idea que se ha generalizado de que “personas con Síndrome de Down son ‘eternos niños’ o ‘angelitos’ hay que erradicarla”. Al cambiar los modelos se transforman los viejos paradigmas establecidos respecto a quién desfila en una pasarela de modas o en quién está en el reparto de un película o serie de televisión.
Reconoce que falta mucho por hacer en materia de inclusión, pero que se pueden dar grandes pasos con la presencia de personas con discapacidad en los medios de comunicación.
De su experiencia en el desfile, Kristal comparte: “Como no había participado antes en uno, estuve muy nerviosa, pero feliz y satisfecha con lo que hice, también con el recibimiento del equipo de trabajo y del público”. Considera seriamente seguir incursionando en el modelaje: “Si no implica un reto, no vale, no está, no existe”.