Prepara un fondue en casa
Esta preparación de origen europeo es ideal para disfrutarse durante el invierno, mientras convives con tu familia o amigos
El fondue se originó en los Alpes Suizos, en donde los campesinos buscaban una manera de alimentarse y mantenerse calientes durante las frías épocas de invierno. Aunque no estamos en ese país, puedes deleitarte con este platillo suizo en la comodidad de tu hogar.
Lo puedes disfrutar en días fríos o lluviosos con un buen vino; en una reunión con familiares y amigos; en una cita romántica a la luz de las velas; o frente la chimenea acompañado de tu pareja.
Prepararlo es más fácil de lo que piensas. Aquí te damos los mejores consejos para hacerlo en tu propia casa.
1. Los mejores fondues se consiguen mezclando dos tipos de queso. Por lo regular se utilizan quesos suizos como gruyère o emmental, aunque también puedes utilizar el cheddar, el gouda, el comté o incluso chihuahua.
2. Los vinos blancos son los más recomendables para prepararlo.
Si no tienes alguno en casa puedes probar con otros licores como el vodka, ron, coñac o con alguna cerveza robusta.
3. Es más fácil disolver la maicena, harina o fécula en el vino antes de mezclar con el queso para que no queden grumos a la hora de prepararlo en casa.
Delicia.
4. Cortar el queso en trocitos antes de combinarlo con los demás ingredientes hará más fácil que se funda.
5. El queso se tiene que derretir a fuego lento, sin dejarlo hervir para que tenga una buena consistencia.
6. Mientras se funde, hay que hacer movimientos lentos y constantes en forma de ocho para que no se pegue.
7. La bebida que debe acompañar a un buen fondue debe ser vino, cerveza o té caliente, para facilitar así su digestión.