Banxico ajusta a la baja el pronóstico de crecimiento
• Recorta la proyección a un rango de 0.5% a 1.5% para 2020; coronavirus es un riesgo para el PIB, alerta
El Banco de México (Banxico) ajustó el pronóstico de crecimiento económico a un intervalo de entre 0.5% y 1.5% para este año, rango más conservador en comparación con el anterior de 0.8% a 1.8%.
La nueva proyección del banco central no incorpora aún el impacto que puede tener el coronavirus; sin embargo, consideró que se trata de un riesgo que puede afectar las previsiones del producto interno bruto nacional.
Al presentar el Informe Trimestral, el gobernador del Banxico, Alejandro Díaz de León, hizo un llamado para incrementar la confianza, realizar acciones que reduzcan la incertidumbre económica interna y combatir la inseguridad, la corrupción y la impunidad, con el fin de mejorar la percepción sobre el clima de negocios y recuperar la inversión.
El titular del Banxico comentó que se revisaron moderadamente las expectativas de inflación para este año, las cuales se mantendrán en niveles menores de 3.4% y que será a partir del primer trimestre del próximo año en que se alcanzará la meta puntual de 3%.
El Banco de México (Banxico) recortó su pronóstico para la economía nacional para este año, de un estimado puntual de 1.3% a 1%, el cual aún no incluye el impacto directo que puede tener el brote de coronavirus en China.
El banco central mexicano argumentó que las razones para realizar el ajuste son la combinación de elementos externos e internos que siguen pesando e impiden la expansión de la actividad económica,como un menor ejercicio del gasto público.
Por ello, el instituto central hizo un llamado a incrementar la confianza, realizar acciones que reduzcan la incertidumbre económica interna, combatir la inseguridad, corrupción e impunidad.
Se necesita mejorar la percepción sobre el clima de negocios en el país para recuperar la inversión, incentivos para fomentar la competencia, creación de valor y encaminar políticas que fortalezcan el Estado de derecho.
Al presentar el Informe Trimestral correspondiente a octubre-diciembre de 2019, el gobernador del Banxico, Alejandro Díaz de León, dio a conocer la actualización de los pronósticos para la economía mexicana.
Para este año, se redujo el intervalo que tenían de 0.8% a 1.8% por uno más moderado, que va de 0.5% a 1.5%: mientras que para 2021 el nuevo rango de crecimiento pasó de 1.3% a 2.3% por uno más conservador, que oscila entre 1.3% y 2.3%.
Expuso que la economía global resentirá los efectos del brote del nuevo brote viral, pero no especificó un impacto para el caso de México, pues reiteró que aún es muy temprano para medir sus efectos, pero se mantendrán atentos a su evolución.
“Es difícil asignar un efecto directo, por eso se incorpora como elemento dentro del balance de riesgos que estaremos monitoreando”, explicó.
Díaz de León estableció que en los países que están más lejos de este problema epidemiológico es más distante y difícil hacer una estimación puntual del probable impacto, por lo que también es complicado hacer una comparación con otros elementos internos de incertidumbre relacionados con el actual gobierno.
Hizo ver que los choques de incertidumbre son los que más afectan al consumo y la inversión en estos momentos.
“Es difícil asignar un efecto directo [al coronavirus], por eso se incorpora como elemento del balance de riesgos que estaremos monitoreando”
ALEJANDRO DÍAZ DE LEÓN Gobernador del Banxico
Retrasan meta inflacionaria. Sobre el tema de la inflación, el Banco de México reconoció que se revisaron las expectativas moderadamente a partir del segundo trimestre de 2020, por precios agropecuarios mayores a los previstos, los cuales serán contrarrestados con la baja de los energéticos, así como por el efecto del salario mínimo en enero.
Así, la inflación general anual se mantendrá en niveles menores de 3.4% y alcanzará la meta puntual de 3% hasta el primer trimestre del próximo año, en tanto que la subyacente lo hará en el cuarto trimestre de 2020.
En el informe anterior, Banxico había considerado que durante el primer semestre de 2020, el objetivo de la inflación se iba a ubicar alrededor de 3%.
En los riesgos para la inflación, mencionó el deterioro de las finanzas públicas, que el aumento de los salarios mínimos sean mayores a las ganancias por productividad y que el tipo de cambio se vea afectado por el proceso electoral en Estados Unidos.