Cierre inminente de 39% de espacios culturales independientes
No existen cifras oficiales acerca del impacto de la pandemia en teatros y foros; los propios artistas han hecho estudios que muestran, por ejemplo, que 60% tiene problemas para pago de servicios y 46% para los salarios
En marzo de 2020, la Red de Espacios Culturales Independientes Organizados (RECIO), nacida en 2017, fue la primera en ofrecer alternativas de apoyo a las instituciones culturales, que no tenían que ver necesariamente con estímulos económicos, sino con líneas de crédito y créditos fiscales para mitigar el impacto económico de la pandemia. Muy temprano, la Red vislumbró una catástrofre financiera debido al cierre obligatorio, tan sólo en unas semanas las pérdidas para sólo 10 espacios eran ya de 10 millones de pesos. Ha pasado un año e Itari Marta, directora del Foro Shakespeare, calcula que la red ha perdido alrededor de 144 millones pesos.
Si sólo para 10 espacios culturales independientes, ubicados en la Ciudad de México, el impacto es de tal magnitud, ¿a cuánto asciende a nivel nacional? No hay cifras oficiales. No existe siquiera un censo oficial de cuántos espacios hay. Pero sí hay aproximaciones realizadas por asociaciones civiles como Pasaporte Cultural, nacido en 2015 con el objetivo de crear una red colaborativa entre los espacios culturales dedicados a distintas disciplinas; en 2020 logró registrar 900 en todo el país.
¿Y las cifras de la Secretaría de Cultura? Hace unos días la secretaria de Cultura, Alejandra Frausto, al ser cuestionada por este diario acerca de si tienen o no un estudio que permita saber las dimensiones del impacto económico y laboral en el sector cultural, hizo alusión al sondeo que realizaron hace ocho meses, aplicado a más de 5 mil personas que, entre otros datos, reveló que 79% aseguró que sus ingresos habían disminuido.
También se le preguntó a Frausto si contaban con datos concretos de las perdidas económicas y de espacios culturales independientes que hubieran quebrado debido a la pandemia. En respuesta, aseguró que hay un “estudio avanzado a nivel nacional”. Pero no ofreció datos.
Las cifras que sí tiene la Secretaría de Cultura son que durante 2020 y 2021 ha destinado alrededor de 318 millones de pesos que han beneficiado a 19 mil 285 agentes culturales.
Entre esos apoyos destacan tres convocatorias para espacios escénicos independientes. En la primera se apoyó a 91 espacios, en las otras dos hubo 112 beneficiaros. Los montos eran de hasta 100, 150 y 300 mil pesos, pero no se ha precisado cuánto dinero finalmente se destinó.
Antonio Zúñiga, director del Centro Cultural Helénico, dijo que hasta el año pasado no existía un censo de espacios, pero que gracias a las convocatorias se podría hablar de la existencia de alrededor de 500 en todo el país. Pero son más.
Pasaporte Cultural, liderado por Francisco Pavón y Mishelle Muñoz, a través de un mapeo que han realizado desde 2019, calcula que son alrededor de 900 dedicados al arte y a la cultura, es decir, desde arte digital, hasta saberes tradicionales.
Pasaporte Cultural registró casi 500 espacios en 2019. Al año siguiente, ante la pandemia, el cuestionario se amplió para incluir preguntas relacionadas con la crisis sanitaria.
“El mapeo parte de la pregunta de cuántos espacios culturales independientes no gubernamentales hay a nivel nacional, pero se vincula a preguntas sobre cómo funcionan y cuáles son sus principales fuentes de ingreso, entre otras cosas. En 2020, el cuestionario lo expandimos e hicimos preguntas que tenían que ver con la pandemia”, explica Mishelle Muñoz.
De los 900 espacios independientes y de autogestión, la mayoría se concentra en la Ciudad de México, con 194; le siguen Estado de México, con menos de 100; después Jalisco, Puebla, Oaxaca, Veracruz, Baja California, Guanajuato, Morelos y Michoacán, con alrededor de 50, o menos. De estos, la mayoría se dedica a las artes visuales, gestión cultural, música, teatro, letras y literatura y danza, cine y medios audiovisuales, y educación e investigación.
El 46% es un espacio rentado, el 30% es propio y el 14% es prestado. Y el 56% dependía económicamente de su espacio. Además, el 54% ha podido tener ingresos por cursos y talleres, el 33% con lo ha hecho con venta de obra, el 30% con funciones y sólo el 7.6% con becas.
El 60% reportó que tenía problemas para el pago de servicios, el 46% para pago de salarios o contribuciones a colaboradores y el 39% se enfrentaba a un cierre inminente.
“El 7% dijo tener un subsidio; es un mito que la mayoría vivan del Estado. Hay otro dato importante: el 46% no podía, en marzo y abril, trasladar sus actividades al ámbito digital. Es probable que estos números se hayan modificado”, dice Muñoz.
El pasado 31 de marzo cerró la nueva convocatoria para continuar con el mapeo con el que ya podrá verse con mayor claridad el impacto de la pandemia en estos espacios, y si, efectivamente, el 39% tuvo que cerrar. Los resultados podrán conocerse en mayo próximo.
“Hemos sido notificados de que varios, al no poder pagar la renta, cerraron; pero también sabemos que varios se fusionaron para compartir la renta. Una vez que cierre la convocatoria vamos a seguir con datos de manera cualitativa para saber, por
MISHELLE MUÑOZ
Pasaporte Cultural
“El 7% dijo tener un subsidio; es un mito que la mayoría vivan del Estado. El 46% no podían, en marzo y abril, trasladar sus actividades a lo digital”
ITARI MARTA Foro Shakespeare “La crisis no empezó con la pandemia, ya estábamos mal. ¿Pero cómo lo cotejamos?, ¿cómo nos fue en 2019? No sabemos”
ejemplo, su relación con los gobiernos locales”, dice Muñoz.
“Habrá variables para este año porque algunos nos han dicho que se están mudando a otro lugar por la renta. Además, en comparación con otros años, vemos un detrimento en la participación, eso nos hace considerar que no están activos o que están en un proceso de reconformación de sus proyectos”, añade Francisco Pavón.
La preocupación crece cuando, hasta hace sólo unas semanas, de los 900, sólo 114 han respondido que siguen activos, pero los gestores advierten que es preciso esperar a los nuevos datos para saber qué ocurrió con el resto durante el último año.
Ante este panorama, Itari Marta, del Foro Shakespeare, advierte: “Nosotros que llevamos muchos años trabajando, no estamos bien, pues creemos que los que tenían poco tiempo no sobrevivieron. Y creemos también que las pérdidas para todos los espacios son de millones. Llevo 10 años trabajando en la Ley de Espacios Culturales Independientes y desde hace una década se habla de que no hay cifras de nada. ¿Por qué está precarizado el sector? Una razón es porque no tenemos ni idea de lo amplio que es”.
Y añade: “Y hay otro gran problema, la crisis no empezó con la pandemia, ya estábamos mal. ¿Pero cómo lo cotejamos?, ¿cómo nos fue en 2019? No sabemos. Yo lo que puedo decir es que nuestro Foro tiene un déficit de mucho dinero, lo rescatamos, abrimos y tuvimos que cerrar, no hemos podido cumplir con los compromisos con nuestros inversionistas. Y este es sólo un caso. ¿Cuántos más estamos así? Nosotros hemos insistido en que la precarización no nació en 2020, se radicalizó”.