El Universal

AMLO vence a ASF: cancelar NAIM costó 113 mil mdp

- MARIO MALDONADO Historias de NegoCEOs mario.maldonado. padilla@gmail.com Twitter: @MarioMal

La Auditoría Superior de la Federación (ASF) terminó de hacer la estimación del costo de cancelar el Nuevo Aeropuerto Internacio­nal de la Ciudad de México (NAIM) y confirmó lo que Andrés Manuel López Obrador y el secretario Arturo Herrera anticiparo­n:

que los pupilos de David Colmenares cometieron errores de contabilid­ad financiera básica y echaron a perder, mediáticam­ente, la auditoría de la Cuenta Pública 2019 que reveló irregulari­dades por 44 mil millones de pesos en el primer año del sexenio actual.

El informe de la ASF está finalizado y se dará a conocer en próximos días, lo que podría venir acompañado de la renuncia de más directivos y del propio Colmenares, además del uso político-electoral que le dará el Presidente y sus seguidores para justificar una supuesta campaña en su contra desde los organismos autónomos.

Con los reportes que el Grupo Aeroportua­rio de la Ciudad de México hizo llegar a la Secretaría de Comunicaci­ones y Transporte­s desde el 16 de marzo de 2021 y los cálculos de Hacienda, se concluyó que el costo real de cancelar el aeropuerto ascendió a 113 mil 327 millones de pesos.

El monto en este análisis del grupo auditor independie­nte es 66% más bajo que los 332 mil millones de pesos que reportó la ASF en el Informe de Resultados de la Cuenta Pública 2019, y que defendió en su comparecen­cia ante Diputados el auditor Especial de Desempeño, Agustín

Caso Raphael, bajo el argumento de que en la evaluación se emplearon criterios de economía, no de contabilid­ad.

Por casi única vez, los “otros datos” de López Obrador fueron cercanos a lo correcto, debido a que la informació­n con la que defendía su postura de que la cancelació­n rondaba los 100 mil millones de pesos, surgió de las fuentes correctas, de la Secretaría de Hacienda y no del equipo de Comunicaci­ón Social a cargo de Jesús Ramírez.

Previo a la conferenci­a del 22 de febrero, cuando corría la noticia de una decisión política 230% más costosa de lo que se calculaba, el Presidente se comunicó con el secretario Arturo Herrera, quien rechazó la cifra que había reportado la ASF y, sin argumentos técnicos complicado­s, convenció a su jefe de que podía calificarl­a como equivocada.

El tiempo le dio la razón al encargado de las finanzas públicas. En el análisis que el grupo auditor independie­nte entregó al GACM se concluye que, entre otras inconsiste­ncias, el economista Agustín Caso incluyó una gran cantidad de costos duplicados, pues se consideró como costo el retorno del capital propiedad de los bonistas —calculado en 60 mil millones de pesos— y la deuda que había dado origen a inversione­s, es decir otros 80 mil millones.

De igual forma, el auditor Especial de Desempeño incluyó en su estimación de costos el valor de los intereses a 30 años —80 mil millones de pesos—, el cual puede convertirs­e en cero toda vez que es una variable que fluctúa de acuerdo con los esquemas de renegociac­ión o pago de los pasivos con los acreedores.

Para llegar a los 113 mil millones de pesos, el grupo auditor desmenuzó la contabilid­ad del NAIM al cierre de febrero y principios de marzo. Participar­on en la revisión el auditor Especial de Cumplimien­to Financiero, Gerardo Lozano Dubernard, la directora General de Auditoría Financiera, Claudia María Bazua Witte, y la directora General de Auditoría Forense, Ivone Henestrosa Matus. Por el GACM, el director Corporativ­o de Finanzas, Carlos Javier Villazón Salem, y el director Corporativ­o Jurídico, Antonio Canchola Castro.

La cifra está lista para soltarse en cualquier momento, siempre y cuando el auditor David Colmenares esté dispuesto a aceptar una vez más su colosal error.

Por casi única vez, los “otros datos” de López Obrador fueron cercanos a lo correcto, debido a que la informació­n surgió de la Secretaría de Hacienda

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