Ninel dice no tener negocios con su marido
El actor, quien interpreta a un entrenador de basquetbol en confiesa que nunca fue bueno en los deportes, por lo que esta serie le hizo redescubrir este mundo, cuando él estaba más familiarizado con la música
Larry Ramos es su marido desde octubre de 2020 pero Ninel Conde asegura que la relación con el empresario no es de negocios, y por lo tanto se desmarca de la detención realizada por parte del FBI, y luego salió bajo fianza.
Ramos, de origen cubano y con quien se casó Ninel el año pasado en México, fue detenido en el aeropuerto de Fort Lauderdale, en Florida, Estados Unidos, acusado del delito de fraude de 22 millones de dólares a 200 personas, pero fueron sólo 10 quienes ejercieron acción penal en su contra, entre ellos la cantante Alejandra Guzmán.
“Es válido dejar claro que la relación personal entre ellos nunca estuvo vinculada a ninguna sociedad de negocios o de otra índole, como algunos han querido dar a entender por darle un tinte más amarillo a la nota”, expresa el Bombón asesino a través de un comunicado.
También se pone de manifiesto que la cantante desea que todo se arregle para Larry en tiempo y forma y de acuerdo a la ley, resultando lo mejor para todos.
“Ella se encuentra tranquila y confiando en Dios y sus tiempos”, remata el comunicado, señalando que la cantante no dará más declaraciones al respecto, por tratarse de un asunto que no le incumbe.
CAPÍTULOS
tendrá la serie Big shot, de Disney+, plataforma que libera un capítulo cada viernes.
Toca instrumentos de percusión con la banda de rock, The Beach Boys, desde 1985.
John Stamos era un sex symbol en los años 80 y 90, cuando se dio a conocer gracias a la serie Full house (Tres por tres), además de que en sus tiempos libres la hacía de percusionista de la banda de rock, The Beach Boys, y también de rompecorazones, situación que cambió cuando llegó a la madurez y a la par, papeles que juró antes jamás interpretaría. Uno de ellos es el de entrenador de basquetbol en la serie, Big shot: Entrenador de élite, a pesar de que no era fan de este deporte, ya que nunca se consideró bueno en las actividades físicas. “Yo de joven era un fanático de las bandas de música en la escuela, ahora que estoy en este proyecto soy un fanático de los equipos de deportes, nunca practiqué deportes, no veía deportes. Fue más difícil para mí aprender la jerga del baloncesto que la jerga médica cuando estaba en ER interpretando a un médico, ¡no estoy bromeando!”, expresa el actor. Stamos, quien este 2021 cumplirá 58 años, estrena en Disney+ (con nuevos episodios semanales) la serie deportiva que se centra en Marvyn Korn (Stamos), un entrenador de basquetbol de un equi
John Stamos Actor
po universitario masculino, que termina trabajando en una escuela secundaria privada sólo para mujeres. Stamos dice que aceptar este trabajo fue un duro golpe para él y su ego, ya que su temperamento lo llevó a la NCAA (La National Collegiate Athletic Association). “Recibí una llamada de mi agente diciendo: ‘Recibirá una oferta en el nuevo programa de David E. Kelley’. Y yo de: ‘¡oh, amo a David Kelley! ¿Estaré interpretando a un abogado?, ¿es como uno de esos personajes oscuros en Big little lies?’ Me dijeron: ‘es un programa sobre baloncesto’. Y mi corazón se hundió. De todas las cosas, dije: ‘¿Soy un jugador?’ Y ellos dijeron: “No, tú eres un entrenador’. Y yo: ‘Está bien, genial... ¿y qué hace un entrenador?’”, recuerda el actor. Si bien reconoce que tenía dudas acerca de este proyecto que lo regresaría a las series que tanto le han dado popularidad, el californiano puso manos a la obra y comenzó con una ardua investigación acerca de la historia del deporte, lo cual hizo que redescubriera algo que pensaba era muy lejano a él. “Pude no sólo conocer a la leyenda del basquetbol, Jerry West; también me enseñó acerca de su
amor por este deporte, me entrenó e hizo que al final me enamorara de la cancha, que me quitara un prejuicio acerca de algo que pensé que me desagradaba y eso es lo maravilloso de ser actor, que nunca dejas de sorprenderte”, indica Stamos. El actor explica que involucrarse en esta historia lo hizo salirse de su zona de confort, que se retara y se diera cuenta de que aún le falta mucho por aprender. “Los primeros días de grabación todo era raro, distinto, nunca había tenido esta sensación. No se parecía en nada a lo que había hecho y el personaje no se parecía en nada a mí. No es agradable, no es una persona sociable, no tiene encanto”, cuenta. Para entrar en la piel de Marvyn, el actor decidió recurrir “al método”, es decir, vivir como su personaje: un entrenador malhumorado que al inicio no quiere ser entrenador de un grupo femenil, por lo que se encerró en su camerino y casa. “No tuve interacción externa con el elenco. No quería conocer muy bien a las chicas, quería aprender sobre las chicas como lo hizo Marvyn. Fue difícil porque no suelo trabajar así, pero al final creo que el resultado se puede ver ahí y es muy convincente.