Una experiencia sensorial
Caballos de fuerza
A detalle
Motor: 2.0 L turbo híbrido Potencia: 310 hp Transmisión: CVT Precio: desde 1.2 mdp
Uno de sus elementos a destacar es la integración de suspensión adaptativa diseñada para filtrar las imperfecciones del camino.
Lincoln eligió Palm Springs, California, como el escenario para un primer contacto con su más reciente lanzamiento, así que hicimos las maletas y tomamos el avión que nos llevaría a conocer Lincoln Nautilus 2024, el SUV precursor de lo que viene para la firma americana de lujo.
Nautilus destaca enormemente, no solo de su predecesor, sino también por la gran propuesta estética que ofrece el SUV de
“entrada” para Lincoln.
Estilizado, refinado, apostando siempre por esa elegancia tan característica pero por supuesto también presumiendo cierta modernidad necesaria hoy en día.
Tiene muy buenos detalles de diseño, la iluminación es sin duda de lo más destacado estéticamente. La parrilla es la gran protagonista y la iluminación delantera como trasera, responden al premio de actor y actriz de reparto.
El interior es, probablemente, donde encontramos su carta más fuerte, ya que inmediatamente lo primero que roba la atención es la nueva pantalla de 48”.
La resolución es bastante buena, muy atractiva visualmente y, a pesar de ser tan grande, en ningún momento se vuelve un distractor, sino todo lo contrario, la integración con el manejo es muy buena. A esto hay que sumarle la capacidad de personalización que se tiene con la disponibilidad de varios widgets. Estos configurables a través de la pantalla central que es de 11” y donde se puede operar prácticamente todo el auto, así como las ventilas del aire acondicionado cuya configuración es digital e incluso hasta se pueden jugar juegos de la PlayStore, conectado un mando Bluetooth.
El sonido Revel Última 3D con 28 bocinas, no defrauda y en conjunto con el sistema de masaje incorporado en los asientos delanteros y la nueva función de aromaterapia, resultan en una gran experiencia sensorial a bordo
Como parte de las novedades para esta nueva generación, Lincoln decide no solamente deshacerse del V6 2.7 litros de la generación anterior, sino que ahora incorpora dos nuevas versiones; una 100% a gasolina y una con hibridación no enchufable. En ambos casos el motor es un 2.0 litros turbo, con variaciones en potencia; 250 hp para la de combustión y 310 hp para la híbrida. Por su parte las transmisiones disponibles también son dos; automática de ocho velocidades y CVT respectivamente, ambas versiones con tracción AWD.
La experiencia al volante, si bien fue breve, por alrededor de una hora y media, fue más que suficiente para destacar la gran calidad de marcha de Nautilus. Cómoda y sin body roll el paso por curva, buena transferencia de peso, suspensión a la altura de las circunstancias y correcta entrega de potencia en la versión híbrida (la única que manejamos) así como un muy buen nivel de insonorización para hacer la experiencia a bordo, mucho más agradable. Lincoln Nautilus propone mucho y se supera a sí misma con esta nueva generación.
El secreto de la pantalla es que son en realidad dos módulos de 24 pulgadas unidos por la mitad para dar la ilusión de formar una superficie más grande y sin cortes.