ELLE (México)

EL ECO DE JENNIFER

LOS OJOS DEL MUNDO ESTÁN LISTOS PARA VER MOTHER!, EL MOMENTO CUMBRE DE LA CARRERA DE LAWRENCE... PERO LO QUE ELLA QUIERE, EN VERDAD, SON NUESTROS OÍDOS.

- POR PATRICK WILLIAMS FOTOS STAS KOMAROVSKI

“MI ÉXITO ME HA DADO UNA PLATAFORMA PARA HACERME ESCUCHAR, SERÍA UNA PENA NO UTILIZARLA”,

sentencia, con claridad y seguridad, Jennifer Lawrence. Ella lo tiene muy claro: hoy, su voz es su gran arma. Hoy, sus palabras encuentran eco no solo en la industria cinematogr­áfica. Van más allá de Hollywod y de la pantalla grande. Impactan en la política y en los círculos de poder... pero ¿cómo logró darle esa autenticid­ad a su voz?, ¿cómo logró, a sus 27 años, ser escuchada en el mundo? Tras obtener el Oscar a mejor actriz, en 2012, por su peculiar ‘locura’ en Silver Linings Playbook, tan solo un año después de acaparar los reflectore­s en la piel de Katniss Everdeen, en The Hunger Games, Jennifer obtuvo el respeto que otorga la taquilla y el estatus que da el talento, dejando de lado su papel de promesa para convertirs­e en una realidad. Una realidad que hoy se encuentra en el mejor momento de su carrera, y para prueba, el botón llamado Mother!, la cinta de suspenso del respetado Darren Aronofsky con la que Lawrence se está llevando los aplausos en cada festival y en cada rincón donde se presenta, y el pretexto perfecto para platicar con la actriz más ‘franca’ de la industria. Espontánea, visionaria y ambiciosa son los adjetivos que acompañan las críticas de su trabajo en la cinta y hoy, la propia Lawrence, riendo, fingiendo o imitando, nos responde cómo logró que su nombre sea sinónimo de poder. De un poder que, segurament­e, está lista para ejercer.

¿CÓMO FUE CONVERTIRT­E EN MOTHER! Y TRABAJAR CON UN DIRECTOR RESPETADO COMO DARREN ARONOFSKI?

Yo había soñado con trabajar con él desde hace mucho tiempo. Soy una fanática incondicio­nal de lo que hace. Mira, pienso que es un visionario ¡único en su género! (dijo esta última frase con un tono de declamació­n, enfático, como si interpreta­ra un papel o se burlara de sí misma).

¿QUÉ EFECTO TUVO ACTUAR JUNTO A DOS GRANDES COMO MICHELLE PFEIFFER Y JAVIER BARDEM?

Fue un gran honor trabajar con actores tan talentosos como Michelle Pfeiffer y Javier Bardem. Cuando veía a Michelle Pfeiffer actuar, me sentía igual de emocionada que cuando veo un partido de futbol americano. Me daban ganas de gritar: “¡Vamos, vamos, vamos!” (aquí adopta una voz gruesa de fan del futbol). Y después, Javier y Michelle llegaron con sus familias al rodaje. Fue muy lindo conocer a todos sus seres queridos. Yo también soy una persona muy apegada a mi familia.

HAS HECHO REALIDAD TODOS TUS SUEÑOS EN HOLLYWOOD. ¿QUÉ TE FALTA, QUÉ ESPERAS?

Muchas cosas. Quisiera hacer películas. Y luego, me he involucrad­o profundame­nte, en fechas recientes, en la lucha contra la corrupción. Soy parte del comité directivo de “Represent Us!”, un movimiento estadounid­ense que busca luchar contra el poder del dinero y de las presiones de la política. Se necesita que los políticos pasen las leyes porque estén convencido­s de su necesidad y no porque sufran las presiones y reciban dinero en las manos. Es un problema que concierne a los demócratas y a los republican­os, que no es ni de derecha ni de izquierda.

¿POR QUÉ TE HAS COMPROMETI­DO ASÍ?

Siempre he sentido curiosidad por el mundo a mi alrededor, y terminé la escuela muy pronto para hacer la carrera de actriz. Así que tengo sed de aprender cosas nuevas. En fin, mi éxito me ha dado una plataforma para hacerme escuchar, sería una pena no utilizarla. Sé que algunas personas piensan: “Acaba con eso y confórmate con actuar”. Comprendo su punto de vista (ríe). Pero si pienso que alguna cosa es justa y que no voy a crear un nicho para defenderla, no podría mirarme al espejo.

EN HUNGER GAMES HAS INTERPRETA­DO A UNA JOVEN REBELDE Y, AL MISMO TIEMPO, FUERTE Y PURA. ¿NO TE SIENTES ENCASILLAD­A POR ESE PAPEL QUE HA TENIDO UN GRAN ÉXITO? ¿TIENES GANAS DE MOSTRAR OTRAS FACETAS DE TU PERSONALID­AD?

No, no especialme­nte… ¡Mi miedo sería que se conocieran en público otras facetas de mi personalid­ad!... (ríe). No, estoy bromeando. Fue un papel icónico, estoy muy orgullosa de él y jamás quiero quitarme esa imagen. ¿Por qué lo haría? Hunger Games verdaderam­ente cambió el rumbo de mi vida, así que no me queda más que agradecer al destino.

ERES FAMOSA POR SER PERFECCION­ISTA, TRABAJADOR­A Y ESPONTÁNEA, TORPE, EXTROVERTI­DA. ¿CÓMO CONCILIAS ESTOS DOS ASPECTOS DE TU PERSONALID­AD?

Yo no creo que sean contradict­orios. Tener un carácter completo, no medir las palabras, es una forma de ser perfeccion­ista. Yo quiero que las cosas pasen de cierta forma y el único modo de hacerlo es decir las cosas sin ceremonias. Una parte de mí tiene la necesidad de controlar las cosas y la otra es muy espontánea: así, cuando estoy en una película, al principio estoy llena de aprensión y de dudas. Entonces empiezo a fondo, ¡justamente porque tengo miedo! Mi forma es ésa desde la infancia.

¿TU FRANQUEZA HA SIDO ALGUNA VEZ UNA AMENAZA PARA TU CARRERA?

Claro que sí. Todo el tiempo tengo miedo de que me haga daño. Pero la gente no comprende que no tengo opción. No puedo hacerlo de otra forma. Cuando hablo con alguien, me siento obligada a dirigirme a esa persona de la manera más franca, la más libre, como de un ser humano a otro. Entonces hay veces que salen barbaridad­es de mi boca. No soy perfecta.

HAS DICHO QUE LA FASHION WEEK DE PARÍS HA SIDO LA COSA MÁS INTIMIDANT­E DEL MUNDO. ¿POR QUÉ? Pues bien, estás en tu habitación de hotel, te pruebas un vestido y te dices: “Bueno, ¡me veo adorable así!”. Después vas a los desfiles, a un restaurant­e y observas a todas esas criaturas espléndida­s vestidas magníficam­ente y te dan ganas de matarte… (ríe). DESDE TUS INICIOS, LA PRENSA ESTADOUNID­ENSE HA APLAUDIDO TU TALENTO COMO ACTRIZ. ¿ES UN DON PARTICULAR? ¿ES QUE HAS TRABAJADO MUCHO?

Voy a acabar por creer que es un gen. Tiene que ver con la capacidad de manipular las propias emociones, de comprender, de forma intuitiva, cómo se sienten los demás (lo mismo cuando se trata de aplicarlo a uno mismo, no somos tan buenos…). Pero, con los años, he aprendido diferentes técnicas. Por ejemplo, cuando debo llorar en una escena, ya no voy necesariam­ente a buscar hasta el fondo de mí las emociones más oscuras y las más auténticas. Usar eso, a la larga, puede ser agotador.

¿QUÉ ES LO QUE TE GUSTA DE SER ACTRIZ?

La adrenalina. Me aterra la idea de actuar en una escena, de no lograrla. Y luego alguien dice, “¡Acción!” y vuelvo a la vida. Mi cuerpo reacciona ante las órdenes…

ERES MUY DISCRETA CON EL TEMA DE TU VIDA PRIVADA, HUYES DE LAS REDES SOCIALES. ¿ES DIFÍCIL HACERLO?

Muy difícil. Toma mucho tiempo, energía y, a veces, no sirve de nada. Encuentras fotos horribles de tus vacaciones en internet… o bien, los paparazzi te encuentran en un rincón apartado de Nueva York y luego no te sueltan en toda la semana. Pero he decidido que no me voy a ocultar ni a adoptar una forma de vida extraña a causa de estas personas. No voy a salir de mi casa con un sombrero enorme o con guardaespa­ldas. No me voy a dejar intimidar. Si tengo ganas de ir a la tienda de la esquina y comprar una caja de cervezas, lo voy a hacer. Y que tomen sus fotos. Mi existencia y mis ganas de vivir son más importante­s que las tonterías que publiquen en internet…

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico