Gran victoria en Gdansk
En una Arena con cemento mexicano en su construcción, la S elección de México mostró con su victoria a domicilio ir en el camino correcto al Mundial y de forma concreta, dominante, venció a los polacos 1-0, en Gdansk. Una actuación redonda, que con el gol de Raúl Jiménez al minuto 12 tomó una ventaja que nunca puso en peligro y el granito en el arroz fue que se fallaron cualquier cantidad de oportunidades, que México elaboró muy bien en su futbol, dejando una grata participación en esta gira europea jugando contra dos top ten, dos cabezas de serie del Mundial. Con línea de tres, que terminó de cuatro, se mejoró mucho en las coberturas, con respecto al juego con Bélgica. Ante la falta de presión, México dominó los tiempos del partido, tocando bien la pelota, no desesperándose y no arriesgando en la salida, que había sido un problema en el juego anterior. El equipo lució sólido en cada una de sus líneas y con un Andrés Guardado llevando el liderazgo del conjunto de Osorio. Muchos criticaron a Juan Carlos por poner a Jiménez solo de inicio, pero es que el plan era un solo punta y Raúl, por juventud tiene mas sacrificio que Oribe, quien cuando entró dio un partidazo, en el que se le negó el gol que buscó afanosamente.
A México le gusta el futbol gourmet y no el molero. Cuando va contra grandes selecciones y potencias, el equipo muestra tamaños, juega al tú por tú y no se achicopala. Osorio aprendió de los errores frente a Alemania y Portugal, como lo de Chile. Con doble escudo le da mayor serenidad al medio del campo. A Dennis Te Kloese se debe esta gira tan provechosa, productiva y que deja alentadoras enseñanzas. El que no arriesga no gana. México ganó y mucho en este paso por Europa. De éstas, más por favor.