Un resultado casi lapidario
LAS CHIVAS TENDRÁN QUE HACER UNA HAZAÑA PARA EL JUEGO DE VUELTA EN BUSCA DE LOS CUARTOS DE FINAL
Zapopan.- El rencor recorrió todos los pasillos del estadio Akron. América se plantó con personalidad en el redil más grande de México y le sacó una ventaja importante a Chivas en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones de la Concacaf. Las Águilas no metieron el acelerador a fondo, el 0-3 en Zapopan les dio la oportunidad de resguardar a jugadores para el fin de semana. La expulsión del improvisado Lalo Torres decantó el encuentro a favor de los azulcremas, que no apabullaron más al chiverío porque no quisieron.
El Rebaño Sagrado tendrá que hacer una hazaña, marcar y no recibir gol. Una noche histórica se vivirá en el Estadio Azteca, por lo pronto, los emplumados son los amplios favoritos para avanzar a los cuartos de final, pues tienen pie y medio en dicha fase.
El estadio Akron, la casa del Guadalajara, se llenó para ver una eliminatoria que pintó pareja, pero que de inmediato los de André Jardine se encargaron de inclinar del lado visitante.
Valdés, Fidalgo y Dos Santos lucieron con el pico afilado. América maniató los intentos tapatíos que se quedaban en promesas con un Guti impreciso, un Pocho desaparecido y el Nene que lució en pañales.
Las Águilas sobrevolaron la cabaña de Whalley, Julián Quiñones se encontró solito frente al de origen español y cuando se disponía a definir, Torres le metió la pierna para una falta clarísima… ¡Penalti!
El propio Quiñones se encargó de silenciar los miles de abucheos que se escucharon en la grada. El colombiano naturalizado mexicano le puso temple y definió perfecto a la esquina del portero, inalcansable para el rojiblanco.