APORTARA EXPERIENCIA
EL VETERANO PASADOR LLEGA A PITTSBURGH CON LA ILUSIÓN DE GANAR UN SEGUNDO SUPER BOWL
Una vez que se confirmó su salida de los Broncos, el nombre de Russell Wilson se convirtió en una prioridad para los equipos necesitados de un quarterback. A pesar de que su experiencia en Denver estuvo lejos de ser exitosa, no abundan en el mercado los mariscales de campo con su palmarés, campeones del Super Bowl y con el talento suficiente para mejorar cualquier ofensiva.
En ese ese escenario, los Steelers rápidamente se pusieron en contacto con él y no tardaron mucho en llegar a un acuerdo. La historia de la franquicia, con seis trofeos Vince Lombardi en la vitrinas, atrajo a Wilson, cuya sed de revancha tras no encontrar cabida en la reconstrucción de Sean Payton con los Broncos podría rendir frutos en un proyecto de años como el de Mike Tomlin en Pittsburgh.
MEJOR ENTORNO
A pesar de que la experiencia fallida de Wilson en Denver genera dudas, sobre todo en su capacidad para liderar una vez más un proyecto ganador, así como lo hizo en los Seattle Seahawks, al ganar el Super Bowl en el 2013, el experimentado mariscal de campo llegará a una franquicia competitiva que ya la temporada pasada demostró estar bien encaminada en su reconstrucción.
A diferencia de los Broncos, que terminaron la campaña con una marca de 8-9 y lejos de los puestos de postemporada, los Steelers avanzaron a los playoffs con un récord de 10-7. A pesar de que Wilson destacó con un total de 26 pases de touchdown por apenas ocho intercepciones, el entorno desfavorable del equipo no ayudó para llevar la campaña a buen puerto.
En Pittsburgh, por el contrario, la ausencia de un mariscal de campo establecido no limitó el potencial del equipo. Las lesiones de Kenny Picket, el mal nivel de Mitchell Trubisky y la resurrección de Mason Rudolph apenas alcanzaron para que la ofensiva sobreviviera con la pobre cifra de 13 pases de touchdown por nueve intercepciones.
BUEN ARSENAL
La clave del buen año de Pittsburgh radica en que finalmente se comportó como un equipo. Tras la salida de Ben Roethlisberger, en 2021, a los Steelers les costó equilibrar la ofensiva y dejar de depender del brazo de su mariscal. La temporada pasada el ataque terrestre dio un paso al frente con el monstruo de dos cabezas conformado por Najee Harris y Jaylen Warren. Harris culminó la campaña con 1205 yardas totales, mientras que Warren lo hizo con 1154.
Wilson tendrá a su disposición ese mismo ataque terrestre, con una línea ofensiva que fue armada casi de manera artesanal y que ha permitido al equipo volver a ser una amenaza por tierra. Por aire, el mariscal de campo contará con la verticalidad del receptor George Pickens, quien superó las mil yardas y anotó en cinco ocasiones. El buen brazo del quarterback, sobre todo al momento de atacar la zona profunda del campo, podría detonar la explosión del receptor. Aún está por ver si Diontae Johnson permanece en el equipo y si los Steelers apuntan a reclutar un receptor en el próximo draft; contará también con la inventiva de Arthur Smith como coordinador ofensivo, un coach que en su momento potenció el ataque de los Titans.
DEFENSA ÉLITE
Impulsada por la figura de TJ Watt, la defensa de Steelers se ubica entre las mejores . La unidad comandada por Tery Austin fue uno de los factores para que Pittsburgh compitiera en el 2023.
1 SUPER BOWL CONQUISTÓ RUSSELL WILSON CON SEATTLE SEAHAWKS