GUSTAVO ALMARAZ
DIRECTOR EJECUTIVO DE GRUPO ESTRATEGIA POLÍTICA
La meta de Gustavo Almaraz Petrie es ambiciosa: impulsar la profesionalización del cabildeo en México, que la gente entienda el valor de la actividad y la reconozca como una labor digna. “Estamos lejos de lograrlo”, dice. Almaraz Petrie es abogado especializado en derecho civil y mercantil. En el año 2000 trasladó su experiencia en litigio a Grupo Estrategia Política (GEP), la firma de cabildeo y consultoría política que su padre, Gustavo Almaraz, fundó hace 22 años. Comenzó como analista y consultor junior, luego “con puro trabajo” se convirtió en su director ejecutivo hace ocho años. Su definición de cabildeo es sencilla: “Somos interlocutores entre el sector privado y el sector público, y hacemos llegar información a los actores públicos para la toma de decisiones”. Pero, en los hechos, su labor involucra más: convencimiento y, en ocasiones, presión para superar la diversidad de opiniones y llegar a coincidencias. “Lidiar con eso es la parte más difícil al tratar de poner a todo el mundo de acuerdo en políticas públicas”, reconoce el también vicepresidente de la Asociación Nacional de Profesionales de Cabildeo. Lo logró en temas de interés social, como la reforma constitucional de 2014, que impulsó con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) para garantizar el derecho a la identidad y a ser registrado de manera inmediata al nacer. Y en 2010 pudo convencer al Congreso de reformar el Código Penal Federal y la Ley de Propiedad Industrial, que permite a la Procuraduría General de la República (PGR) perseguir de oficio los delitos de piratería. El abogado explica que su labor exige conocimiento, paciencia, conciliación y, sobre todo, ética y transparencia. No es una tarea fácil, pues el cabildeo ha cargado sobre sus espaldas con una mala reputación del pasado. Para regular su práctica, en 2010 y 2011, el Senado y la Cámara de Diputados aprobaron, respectivamente, reglamentos que prohibieron a los legisladores aceptar dádivas por parte de cabilderos. “Son momentos difíciles cuando cuestionan la actividad, porque pegan en el centro de lo que hacemos”, afirma el directivo, quien entre sus clientes tiene a empresas de todos los sectores, desde farmacéuticas hasta compañías de alimentación. Por eso está empeñado en consolidar GEP como un despacho reconocido por su ética e impulsar la actividad con estándares cada día más altos. También se ha involucrado en temas de transparencia y anticorrupción, como presidente del Comité de Legalidad y Estado de Derecho de la American Chamber México. “Tengo mucha fe en el Sistema Nacional Anticorrupción y desde distintos foros quiero impulsarlo”, asegura. En la American Chamber México confían en su compromiso. “Es muy consistente en su ética corporativa”, dice Ana López Mestre, directora general del organismo.
ESTUDIOS: Licenciatura en Derecho en la Universidad Panamericana. VIVE EN: Ciudad de México. SECTOR: Cabildeo. 39 EDAD