Decisión
Tribunal Supremo asume poderes
La decisión del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela de asumir las competencias del Congreso desencadenó ayer una avalancha de críticas de la oposición venezolana y de varios países de la región contra el gobierno de Nicolás Maduro por considerar que el fallo constituye un zarpazo a la constitución y el estado de derecho en el país sudamericano.
La sorpresiva sentencia de la Corte, señalada de estar controlada por el gobierno, agudizó el conflicto entre los poderes públicos y amenaza con profundizar la crisis en el país sudamericano.
En el fallo —que fue difundido la noche del miércoles— el Tribunal resolvió que “mientras persista la situación de desacato y de invalidez de las actuaciones de la Asamblea Nacional esta Sala Constitucional garantizará que las competencias parlamentarias sean ejercidas directamente por esta Sala o por el órgano que ella disponga”.
En enero de 2016, y tras una aplastante victoria, la oposición asumió el control del Congreso por primera vez en 17 años.
Desde entonces, el Tribunal Supremo ha emitido casi medio centenar de sentencias contra las leyes y acuerdos aprobados por el Legislativo y lo ha declarado en desacato.
El presidente de la Asamblea Nacional, Julio Borges, denunció que “en Venezuela Nicolás Maduro dio un golpe de Estado”.