Rabietas infantiles
¿Las tienes controladas?
Las rabietas infantiles son un estado de impaciencia y enfado propio de los niños pequeños, especialmente en el segundo año de vida. Generalmente, las rabietas suelen originarse por un leve motivo y, en este caso, duran poco. Respecto a la edad, los berrinches pueden suceder a cualquier edad, pero son más frecuentes entre los 18 meses y los 3 años, aunque las rabietas infantiles pueden durar hasta los 5 o 6 años y desaparecen gradualmente después. ¿Qué puede desencadenar una rabieta?
Las rabietas infantiles pueden estar causadas por frustración, enfado, confusión y temor. Inevitablemente todos los niños entre los 18 meses hasta después de los 3 años, se rebelan contra la autoridad de los padres y reclaman su individualidad, mientras intentan explorar y aprender donde están los limites. Los niños entre 1 y 3 años con rabietas:
—No toleran bien ninguna forma de control. —Luchan por su independencia, son más exigentes y se muestran más desafiantes.
—Se debaten entre la independencia y la dependencia. —Quieren control y tratarán de controlar a sus padres. —Generalmente, sufren rabietas. 5 causas de las rabietas infantiles:
Existen muchas causas que pueden desatar una rabieta, algunas de las cuales son llamar la atención, desear lo que no es suyo, tratar de mostrar lo independientes que son o por sentirse cansados y frustrados. 1. Llamar la atención:
La primera rabieta de un niño empieza solo por llamar la atención, y rara vez para manipular a los padres, pero si la recompensa a una rabieta es recibir mucha atención
gratificante puede ser una razón importante para pronto tener otra. 2. Querer algo que no
tiene: Deben aprender a esperar y a aceptar lo que les dices. Si les dices que no le vas a dar un caramelo o que un amigo no le deje su juguete, tendrá que aceptar que no puede tener todo lo que desea. 3. Intentar probar su independencia: Cuando intentan hacer algo y no les sale, nosotros intentamos ayudarle, pero no quiere, se frustra por qué
no puede hacerlo solo. 4. Frustración interna:
La sensación de impaciencia creciente junto con su limitada habilidad para tener éxito con las cosas que intenta, o no ser capaz de expresar totalmente lo que quiere debido a una falta de habilidades lingüísticas, pueden desencadenar una rabieta.
5. Celos: Van dirigidos a un hermano o a su hermana, cuando su deseo de conseguir algo no se cumple como quieren.