En contra de la corrupción
La sección para el Desarrollo Humano Integral de la Santa Sede trabaja en la conformación de un grupo de especialistas que promuevan prácticas para el combate a la corrupción vinculado a fenómenos como la trata de personas y la pobreza.
El cardenal Peter Turkson, responsable del área y uno de los organizadores del “Debate Internacional sobre la Corrupción” indicó que “antes de decidir sobre acciones, queremos tener la visión más amplia posible sobre la cuestión. Y pasar entonces a la creación de un grupo de trabajo que llevará adelante este diálogo”. “Queremos identificar cómo se realiza la corrupción en la pobreza, la trata de personas, la migración, en las bancas y la finanza. No debemos hablar de resolver la corrupción en teoría, sino de combatir la corrupción en cada uno de los sectores”. Precisó que la corrupción es, muchas veces, la cara misma de la criminalidad porque no se limita sólo a un acto preciso sino que es un estilo de vida. Por eso constató que este fenómeno tiene la capacidad de “corroer” a las instituciones y a las personas. Reconoció que la Iglesia católica no está exenta de este flagelo porque está constituida por personas “que son parte de una cultura”. Aclaró que cuando se habla de Iglesia no se puede reducir todo al Vaticano, porque también en diversos países se puede encontrar casos de corrupción entre personas de la jerarquía eclesiástica. “Por eso también organizamos este encuentro, para salir de esa tentación”, ponderó.