Enseñar con el ejemplo
Socorro Balám: “Gracias al ejemplo de mis padres sigo dedicada al trabajo”
Asus 68 de edad, la ciudadana Socorro Balám continúa vendiendo tal cual como lo hacía cuando tenía 12 años de edad.
Ubicada actualmente en el área de carnes del mercado Pedro Sáinz de Baranda en la capital del Estado; Socorro Balam, reveló que sus orígenes en el comercio fueron el resultado de la escasez y la pobreza. “Empecé a trabajar a los 12 años para colaborar con el sustento del hogar, éramos muchos pero no había la parte económica, mi padre no tenía una profesión. Ellos se encargaron de crecernos a la buena de Dios. Le doy muchas gracias a Dios que ellos nos impulsaron a trabajar, no a robar ni hacer cosas indebidas; eso es una enseñanza de que se puede salir adelante sólo es cuestión de que uno persevere”, detalló la ciudadana Socorro Balám. Recordó vivir el vaivén comercial durante las modificaciones que se le han hecho al mercado principal en décadas pasadas; laborando finalmente en el puesto de carnicería de la familia.
“Empecé trabajando de ayudante en todos los comercios, en la taquería, en la panadería, aquí en la carnicería. Terminamos acá teniendo un puesto de mi hermana; ella es la que inició este negocio”, señaló la “ventera”. Afirmó que los tiempos de bonanza decayeron, pero no la “achicopala” la situación para continuar. Socorro Balám; abundó que el ejemplo que le ha dado a sus tres hijos es el amor al trabajo, lo que repercutido que su familia viva de éste y no de acciones ilícitas. Asimismo, la campechana expresó su preocupación por el rumbo de algunos jóvenes quienes se han desviado de la moralidad y la justicia, incluso manifestó su interés por tener tal vitalidad para seguir laborando.
“Me da mucha lástima la juventud, los veo en el mercado fumando, tomando, robando y todas esas cosas. Es una juventud que están desperdiciando, la cual quisiera para mí, para seguir trabajando. No sabes los dolores, los achaques; pero aquí estamos saliendo adelante, mientras que estos muchachos que tienen toda la vida por delante la están desperdiciando. Creo que los valores se inculcan y esa semilla que se siembra da fruto, porque eso es lo quedamos a nuestros hijos también”, refirió añadiendo que la convicción de la existencia de Dios puede no sólo favorecer la recuperación de las nuevas generaciones, sino de la sociedad entera. Finalmente aconsejó luchar a favor de la vida, de la realización de los sueños en base a los valores que norman a la humanidad.
“Vale la pena vivir, vale la pena trabajar, lograr nuestros objetivos en base del esfuerzo, la disciplina y recuerda: no hagas lo que no quieres que te hagan”, concluyó la locataria Socorro Balám.