No los pases por alto:
1. Dolores de cabeza:
Este estado emocional provoca una contracción de los vasos sanguíneos, por lo que disminuye el flujo de sangre hacia el cerebro y aumenta la tensión en la cabeza.
2. Problemas de la digestión:
La producción excesiva de cortisol, es decir, la hormona del estrés, influye en el aumento de secreciones ácidas y de problemas como el ardor y el reflujo.
3. Caída del cabello:
Es normal que, en cierta medida, el pelo se caiga todos los días. Sin embargo, producto del estrés, se puede presentar una pérdida excesiva y dificultades en su crecimiento.
4. Dolores lumbares:
Los dolores lumbares son frecuentes en aquellos cuyo trabajo y estilo de vida implica permanecer demasiado tiempo en la misma posición. Estos se producen por la tensión muscular y la reducción de la circulación, por lo general relacionadas con una mala postura.
5. Enfermedades cutáneas / de la piel:
Aunque estos suelen tener su origen en factores externos como el sol y las toxinas, también están relacionados con el sometimiento del cuerpo a este estado emocional. 6. Manos inflamadas: Notar las manos inflamadas, incluso doloridas, sin razón aparente, es un indicio de episodios de estrés que no han sido controlados.
7. Cambios del apetito:
Mientras algunas personas estresadas pierden el deseo de comer, otras sienten una ansiedad constante por ingerir alimentos ricos en calorías. Esto se debe a los desequilibrios que sufre el sistema nervioso.