El caso de Pedro Sulub

Pedro Sulub Ortega, de 84 años de edad, originario del estado de Yucatán, pero radicado en el poblado de Santa Cruz Ex Hacienda Calkiní sigue trabajando en la creación de artesanías, a pesar de no contar con ningún apoyo por parte de programas de gobierno.

Desde los 9 años de edad, Pedro realiza artesanías de madera como trompos, yoyos, batidores, molcajetes y baleros, trabajos que le enseñó su abuelo. Comenta que hasta la fecha no ha recibido ningún apoyo de parte del gobierno, sólo llegan a tomarse la foto de la labor que hace y se van, e incluso ha firmado documentos, de supuestos apoyos, que jamás han llegado.

Sin embargo, se limita el que quiere, ya que con ingenio pudo crear su propia herramienta a base de maderas y una soga de naylon que ahora es lo que está usando para poder continuar su labor, ya que indicó “sino me esfuerzo, aunque me duele la pierna, casi no veo y estoy viejo, nadie me va a mantener”.

Los productos que se están realizando varían en sus costos, algunos pueden costar desde 40 pesos hasta 200 pesos, esto según el artículo realizado, ya que depende del tamaño y decorado. Para poder hacer una batidora o una azucarera se tiene que laborar todo un día completo, muchas veces inicia la labor desde la una de la mañana para empezar a tallar la madera.

“La verdad soy un humilde artesano y vivo al día con el trabajo que realizo y por tal motivo no cuento con el recurso económico para poder construir una choza y de esta manera poder vender más productos”.