Rinden homenaje a su obra
Cincuenta años después de recibir el Premio “Rómulo Gallegos”, varios expertos se reunieron en un coloquio en Madrid, al que asistió su autor, Mario Vargas Llosa, para analizar la trascendencia de la novela “La casa verde”, que calificaron como “un hito” de la literatura y “un clásico muy vivo”. “La casa verde” representaba para el autor peruano “la búsqueda de la novela total”, algo que el nobel de Literatura consiguió “con creces”, según el director de la Cátedra Vargas Llosa, el escritor y periodista Juan José Armas Marcelo.
“’La casa verde' es un clásico muy vivo, como son los grandes clásicos. No es un monumento que haya que arrinconar en la historia de la literatura porque, dentro de la complejidad de sus técnicas de escritura, se lee fácilmente”, subrayó Eduardo Becerra, profesor de Literatura Hispanoamericana de la Universidad Autónoma de Madrid. Con él coincidieron el crítico literario Fernando Rodríguez Lafuente y Carmen Ruiz Barrionuevo, catedrática de Literatura Hispanoamericana de la Universidad de Salamanca, quien describió la novela -la segunda del peruano- como “un hito” y como “una de las más grandes” de la literatura universal.
Después de que el libro se alzara con el Premio “Rómulo Gallegos” en 1967, el galardón recayó después en “Cien años de soledad”, de Gabriel García Márquez, y en “Terra nostra”, de Carlos Fuentes.